Doha.- El aficionado mexicano se imaginaba un triunfo sobre Polonia y para ello lo buscaba festejar para redondear su buen comportamiento en el estadio 974.

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El florido vocabulario del paisano era tan amplio que cualquiera se podía imaginar palabras altisonantes en contra de los nuestros y el rival, incluso el tan famoso grito de ¡pu…! a la hora del saque de meta del portero rival.

No obstante el sonoro grito que la FIFA etiqueta de homofóbico no se escuchó, no sonó y parecía que hasta se quedó en nuestro país, pues a tierras qataríes no aterrizó.

Lo que sí fue y se escuchó con vehemente enfado ante el marcaje de penalti que a la postre atajó Memo Ochoa fue uno muy popular “¡Hijo de pu…!”, mismo que llevó como destinatario al juez central debido al penalti y tiempo después a otra jugada apretada.

Es posible que la FIFA escuche y analice dicha ofensa, por lo que podría tomar cartas en el asunto toda vez que busca el respeto en todos los entes de la competencia.

México se hizo sentir como si fuera local

México y sus aficionados lo volvieron a hacer y sin importar las distancias y los altos costos del país qatarí, llenaron el estadio 974 para apyar a México en su debut mundialista.

Las gradas del estadio estuvieron completamente abarrotadas por miles de paisanos que pintaron de verde al inmueble que está hecho de contenedores.

De todas partes de México, Estados Unidos y hasta de Europa, los mexicanos fueron y cantaron la advertencia que le hacen al rival cada vez que son mayoría.

¡Y ya lo ven y ya lo ven… somos locales… otra vez! Fue la popular porra que acompañó a un estadio abarrotado y que presentó grandes espacios en color blanco en apoyo a Polonia, pero no fue ni una cuarta parte de lo que metió México en el choque contra Polonia.

El registro de asistencia dictaminó 39, 369 aficionados y en su mayoría con el verde, blanco y rojo en su ropa e indumentaria para apoyar al Tricolor.

Abuchearon a Gerardo Martino

La relación Martino-afición sigue fracturada y no se ve para cuándo exista una comunión. Posiblemente ésta se daría si México gana y juega bien o más aún si llega al quinto partido, pues no se ve otra solución.
Previo al arranque de juego, en el anunció del sonido local, al momento de citar a los titulares un sonoro abucheo se dio en todo el estadio 974 de Doha. El argentino no es querido por el aficionado y como ha sido en nuestro país y en Estados Unidos, la gente se escuchó y nuevamente ejemplificó su poca paciencia hacía el seleccionador.

Contrario a los abucheos, Chucky Lozano, Héctor Moreno y Edson Álvarez fueron de los más ovacionados. Pese a que el Tata vivió intensamente el encuentro en pleno banquillo técnico, la gente no le aprueba sus últimas actuaciones en donde la falta de victorias, su nulo futbol y las derrotas contra Estados Unidos son parte de ese antecedente negativo

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