CÉSAR ÉVORA: “FUI PAREJA DE MARJORIE DE SOUSA EN ‘MUNDO DE FIERAS’, Y EN ‘HASTA EL FIN DEL MUNDO’ SOY SU PADRE. ¿TE DAS CUENTA CÓMO VOY ENVEJECIENDO Y LAS ACTRICES SE CONSERVAN CADA DÍA MEJOR”
CÉSAR Évora, quien está en “Hasta el fin del mundo”: ¿No está raro que en una novela fuiste pareja de Marjorie de Sousa y ahora sales de su papá?
“Soy el papá de Marjorie en la historia y puedo ser el padre de ella, no tengo ningún problema. Es cierto, en una novela fuimos pareja, en ‘Mundo de fieras’, y ahora me toca ser su papá. ¿Te das cuenta cómo voy envejeciendo y las actrices se van conservando cada día mejor? Pero sí puedo ser su padre porque Marjorie es bien joven y yo tengo un hijo varón, Rafael, de mi primer matrimonio, que tiene 28 años”.
-¿Y por qué no le pusiste a tu hijo César, como tú?
“No le puse César porque me parece absurdo y tonto lo de ‘César chico y César grande’. Él es músico y no tiene que aclarar que es Évora, y a todos mis hijos les puse un solo nombre: Rafael, Mariana y Karla, quien mide un metro 80, es la más alta de los tres; de chiquita le puse: -mi bebé dinosaurio- porque era enorme, siempre la ponían al final y a su lado todas se veían pequeñitas y el novio es altísimo, pero eso no importa, también ha andado con chaparritos”.
-¿Cómo conociste a tu mujer?
“Vivian es cubana, la conocí en Varadero, ella es nacida y criada en Varadero y yo estaba haciendo una serie, todavía no venía a México, y me dijeron: ‘tienes que conocerla, y me pareció que era un ángel que se me aparecía en el atardecer, y dije ‘caramba, es un ángel’, y ya, ella estuvo renuente, no quería, porque decía: ‘Es un artista y éste viene a picar’. Y no quería, y llegué en plan formal, siempre he sido muy serio, y me dijo que sí”.
-Dicen que eres el más fiel.
“Le he sido totalmente fiel y lo más hermoso de mi relación es esa tranquilidad y yo la tengo a mi lado, pero no es mi media naranja, es mi naranja completa, es especial, no me hace falta mirar a ninguna parte”.
-¿Es cierto que todos tus calzones son negros?
“Sí, todos son negros, soy una persona muy conservadora, ando cómodo, no ando en ninguna apariencia, nunca ando a la última moda, de joven no me interesó, y de viejo menos me preocupa. Con lo que me sienta cómodo”.
-¿Eres controlador con tu esposa?
“Con mi esposa no soy controlador, al contrario nos respetamos mucho, hay una relación de mucha confianza, ella me dice adonde va y hace sus cosas, es su vida y lo hace tranquilamente, me lo comunica, pero no por controlarnos porque ella no me cela para nada, Nunca ha ido a los foros a vigilarme, ella tiene un sentido crítico muy importante, me ubica y me dice: ‘te falta eso’, y siempre acierta en lo que me está diciendo, no me persigue y así nos llevamos con total comunicación”.
-¿Nunca espiaste a tus hijas?
“No, qué va, yo soy muy respetuoso. Las llamadas, sus mensajes, son para mí una cosa inviolable, yo no toco eso, no lo necesito para ver si están en buenos pasos porque uno como padre lo sabe, sabes el hijo que tienes, te das cuenta si estás preocupado por tus hijos. En el caso de mis hijas yo nunca he tenido problema de lo que hacen porque el único ejemplo que han visto es trabajo, esfuerzo y sacrificio, ellas ven cómo me trata el público con respeto y cariño y esa es la mayor enseñanza y cuando se descarrilan lo sabes como padre, no hay que seguir las llamadas telefónicas”.
-¿Es cierto que ya no fumas?
“Fumé durante más de 30 años, dejé el cigarro de un día para otro, fue un acto de voluntad suprema, una noche dije ‘no fumo más’ y yo fumaba tabaco negro y no las regalé para no hacerle daño a nadie, pero no me sentí mal ni ansioso. Me di cuenta, por el contrario, que era el cigarro el que me daba ansiedad, y desde que dejé de fumar recuperé el olfato, el paladar, la capacidad de respiración y subí un poco de peso, me encanta comer rico.
“Mira, yo soy un feminista convencido porque tengo dos hijas hembras, tengo una esposa que es la que manda en la casa como siempre. Pero soy un defensor del feminismo, es una forma de pensar, de vivir, de reaccionar ante el mundo. Yo creo que tenemos muchos atavismos como hombres. Yo siempre digo que la mujer es producto de todas las represiones y toda esa bota que ha tenido el hombre tratando de controlarla y ha sido más inteligente, ha desarrollado inteligencia mayor que el hombre, el hombre se queda con la fuerza bruta, con esa testosterona que tiene y con eso lo soluciona todo”.
-¿Tú crees que tu voz es producto de tu testosterona?
“No creo que me sobre, eso no sobra. Pero dos cosas sí te puedo decir; una, es la testosterona, y la otra, la herencia. Mi padre tenía una voz similar”.
-¿Y te dejaste la barba blanca adrede?
“Sí, me la dejé para la novela”.
-¿Te molesta salir de abuelito?
“No, para nada. Te voy a decir una cosa: en mi vida nunca he hecho papeles de mi edad, siempre tuve que hacer personajes de hombres mayores que yo. Uno, no me preocupa la edad. Dos, tengo una personalidad, una forma de ser que proyecto a lo mejor más edad; tengo 55 años, nací el 4 noviembre de 1959, nunca me he quitado la edad, ni los años, ni mucho menos. Pero no me importa aparentar más como actor. Tengo la suerte de que voy aparentar más o menos, me pintan el pelo o lo que quieran hacerme”.