A pesar del dolor de una lesión, el serbio Novak Djokovic venció a Grigor Dimitrov con parciales 7-6 (9/7), 6-3, 6-4 en más de tres horas de partido y logró avanzar a los octavos de final del Abierto de Australia.

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Djokovic tiene el desafío más importante que es su un décimo título en Melbourne. Gracias a los errores del balcánico y asegurar sus golpes le bastaron al número cinco del mundo para llevarse el partido en el que necesitó atención médica en varias ocasiones .

“He conseguido sobrevivir y salir adelante de alguna forma. Me lo tomaré partido a partido”, dijo en rueda de prensa quien describió el dolor como “una montaña rusa”, con altibajos constantes.

En un juego de más de tres horas, Djokovic no dio opción en el segundo parcial, en el que le bastó con evitar errores y quebrar el sexto juego.

El partido iba bien  hasta que las molestias físicas del serbio reaparecieron a mitad del tercer set, que estiraba la pierna entre saque y saque y volvió a precisar de atención médica en el banquillo.

“Fue una batalla increíble, 3 sets en 3 horas. Ahora a descansar y preparar el próximo”, dijo Djokovic, que se enfrentará al australiano Alex de Miñaur número 24.

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