20, octubre 2022 - 18:21
El estadio 974 tiene sus días contados. Foto: Miguel Ángel Mújica
Doha.- Ubicado en la zona conocida como Ras Abu Abboud, el estadio 974 es de los que tiene los días contados. Forjado temporalmente para recibir los encuentros de la Copa Árabe y la Copa del Mundo de Qatar, no vivirá más allá de la etapa de octavos de final, pues ahí concluirá su participación, para posteriormente ser desmembrado para otros fines navales.
La situación con el 974 desmoraliza a todos los visitantes. Son pocos los que suben a la línea dorada del metro qatarí para llegar a las afueras del estadio y encontrarse un letrero muy claro que no dejará grabar ni fotografiarse a los alrededores del inmueble.
La seguridad no es la mejor, pro suele acercarse a las personas que buscan el recuerdo de cerca. “No es posible tomar fotos por restricciones navales”, dice el guardia a cualquiera que está cerca y enfoca con alguna cámara o celular. “En caso de que se sorprenda a alguien sacando fotos, le tendremos que recoger el aparato”, defiende el oficial ante los automóviles que llegan con la ilusión de ver la cancha de cerca.
Resulta imposible no quedar anonadado con la vista que genera. Las múltiples cajas de cargamento marítimo que integran la parte exterior del inmueble sorprenden a cualquiera. La altura también juega su papel y los 40 mil espectadores que vibrarán con los siete encuentros, entre ellos el México-Polonia, podrán disfrutar de un lugar pegado a la costa y muy cerca del Museo Nacional de Qatar.
El estadio 974 no es el culpable de tener pocas visitas o que prácticamente nadie, a estas alturas previas a la Copa del Mundo, pueda obtener una foto, son las prohibiciones de la Fuerza Naval Qatarí las que no dejan disfrutar del inmueble.
Inaugurado el 30 de noviembre del 2021, verá su último encuentro en los cuartos de final y después desaparecerá del mapa oficialmente. Será el Tricolor el que le dé la bienvenida al futbol de un Mundial, cuando choque contra el equipo polaco que lidera Robert Lewandowski.
Una de las características y por las que es llamado de dicha forma, es porque son el número de contenedores que integran todo su alrededor. Curiosamente, el 974 es la clave telefónica internacional que caracteriza a Qatar. Un número que sin duda va ligado al país y que sobresale de entre cualquier otro.
Ante sus últimos días de vida, pues será desmantelado para que sus partes sean utilizadas para crear instalaciones deportivas y también donadas a países subdesarrollados, el 974 pasará a la historia como el único estadio en la historia de la Copa del Mundo que fue desmontable.
Así es el inmueble que fue diseñado por la firma de arquitectos ibéricos Fenwick Ibarren diseñaron y es otra de las sedes del Mundial qatarí.
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