FOTOS: REUTERS Foxborough.- Una vez más, la defensiva de los Patriotas fue determinante para conservar el invicto y colocarse con una marca de 6-0, luego de vencer por un contundente 35-14 a los Gigantes de Nueva York. Tom Brady no tuvo un partido brillante, sin embargo, con dos touchdowns por la vía terrestre fue suficiente para enterrar sus fantasmas ante los Giants y colocarse al fin con récord positivo en el enfrentamiento directo (4-3).

EL JUEGO

La defensiva de Nueva Inglaterra sigue mostrando un nivel envidiable. No importa el equipo que tenga enfrente, siempre responde y pone puntos en la pizarra. Fue precisamente con una patada bloqueada dentro de la propia yarda 20 de los Gigantes que los Patriotas abrieron el marcador, casi al final de un primer cuarto que se tornaba tenso. Poco más adelante, ya en el segundo periodo, Bolden aumentó la ventaja con un acarreo de una yarda. [gallery ids="452911"] La noche parecía una pesadilla para los Gigantes. Daniel Jones pagó el precio de todo novato al pisar el césped sagrado del Gillette Stadium y en reiteradas ocasiones fue víctima de la feroz defensiva rival al ser interceptado en tres ocasiones. Aún así, el novato tuvo una reacción efímera, pero al fin reacción y recortó distancias con un pase de 69 yardas para Golden Tate, su principal arma tras la ausencia de hombres como Shepard y Engram en el ataque aéreo. Nueva York aprovechó el ímpetu y su defensa empató el partido tras devolver un balón suelto hasta la zona prometida. Pese a los pronósticos, no fue un partido fácil para Tom Brady. El quarterback fue presionado la mayoría del tiempo, situación que lo obligó a cambiar el plan para apoyarse por completo en el juego terrestre. Fue así que Nueva Inglaterra rompió el empate al final del segundo cuarto, luego de una serie larguísima en la que logró establecer la carrera hasta llegar a la zona roja, donde el propio mariscal rompió el plano con un acarreo de una yarda. La segunda mitad no cambió mucho el libreto. Con los Patriotas arriba apenas por siete puntos, el partido se mantuvo en el alambre, entre acarreos de Nueva Inglaterra que dejaron correr el reloj a una velocidad supersónica y pases desesperados y poco precisos de Daniel Jones. Fue, sin embargo, ya entrado el cuarto cuarto, un balón suelto de corredor de los Gigantes Jon Hilliman devuelto hasta la zona de anotación lo que inclinó por completo la balanza para Nueva Inglaterra. [gallery ids="452912"] El golpe de la defensiva fue definitivo para frenar cualquier intento de remontada por parte de la franquicia de Nueva York. Como es costumbre en estos casos, Tom Brady olió sangre y dio el tiro de gracia con un nuevo acarreo desde la yarda uno para sumar su segundo touchdown por tierra de la noche y poner cifras definitivas. No hubo sorpresa esta vez. El recuerdo de los Super Bowls luce lejano.

DANIEL JONES

YARDAS: 161 INTERCEPCIONES: 3 TOCUHDOWN: 1

TOM BRADY

YARDAS: 334 INTERCEPCIONES: 1 TOCUHDOWN: 0