PARA ENCHILAR LA PIEL / “DEL RETIRO AL REGRESO”

SALUDOS Enchilados amigos… SI para cualquier persona es muy difícil cuando la vida productiva llega a su ocaso, para los deportistas parece que es todavía más cuando llega el retiro. Muchos son los atletas que después del adiós “no se hallan”, como dirían en mi pueblo, y tienen que regresar al deporte de sus amores. En muchos otros casos la falta de dinero, por despilfarrar las ganancias que les dejo su deporte, acelera la toma de decisión y los obliga a regresar, para bien o para mal.

En la última semana nos hemos enterado de los casos de extraordinarios atletas que al parecer están considerando su regreso. Óscar de la Hoya, el llamado “Golden Boy” del boxeo, lleva semanas entrenando muy fuerte, y dice gente cercana a él que se encuentra en perfecta forma física ¿El motivo? Floyd Mayweather le ha lanzado el reto de realizar una revancha en septiembre de este año, para cerrar el capítulo en el que ambos se enfrentaron en 2007.

En aquella ocasión Mayweather ganó la pelea, pero ésta concluyó con una muy cerrada decisión dividida y la “espinita” ahí se quedó. Cuando Floyd retó al “Golden Boy”, este último dijo que estaba felizmente retirado, pero al parecer la “cosquilla” de regresar al gimnasio, el correr por las mañanas, el ponerse los guantes y toda la motivación que trae consigo una preparación para subirse al ring le ganó. El dueño de “Golden Boy Promotions” sabe que no es lo mismo estar cerca de los peleadores que ser el protagonista de una pelea estelar.

El otro caso es Rivaldo, aquel extraordinario jugador brasileño campeón del mundo en 2002, ahora de 43 años de edad, y después de más de tres en el retiro, ha confirmado por redes sociales su regreso a las canchas para jugar con el Mogi Mirim, equipo que ocupa los últimos lugares de la Segunda División del torneo local brasileño y del cual también es presidente. Su gran motivación es jugar al lado de su hijo, lo cual le ha dado una inyección de juventud y ánimo, sin embargo, el permiso final y última palabra será dicha por su rodilla, la cual provocó su adiós a las canchas tiempo atrás.

Muchos, muchos son los casos de deportistas que regresan del retiro, pero la diferencia es la forma en la que lo hacen. Y es que cuando uno platica con una figura retirada, todos coinciden al afirmar que el deporte es su pasión, que el sentir la cancha, pista, duela o ring y toda su adrenalina, el entrenamiento diario, el cuerpo dando su máximo esfuerzo… todo eso es ¡i-ni-gua-la-ble!

Y si eso además les dio fama y fortuna, esas ganas de seguir compitiendo difícilmente se van, aun cuando los años también pesan. Lo más importante es meditar muy bien el motivo del regreso y sus consecuencias, porque hay quienes sólo regresan para arrastrar su prestigio.

Del retiro al regreso hay solo un paso y por eso a todos mis lectores en este diario y en redes sociales les digo: muchas gracias por acompañarme cada domingo. Hay ciclos que se cierran pero inician otros, nos leemos muy pronto, y recuerden: “Máscaras habrá muchas, pero Enchilada… sólo una”.

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