DOS grandes figuras del toreo, Rodolfo Gaona “El Califa de León” y “El Ciclón” Carlos Arruza. Eslabones mundiales. No se comprendería la fiesta sin sus valiosas aportaciones. Ambos fallecieron un 20 de mayo, de diferentes años. Aunque ha pasado mucho tiempo, el mundo taurino les mantiene siempre vivos, honrando su legado.

Carlos Arruza
(1920-5/20/1966)

Carlos Arruza vio la primera luz el 17 de febrero de 1920, en la ciudad de México, hijo de españoles y sobrino del poeta León Felipe. Destinado estaba el llamado, años más tarde, “El Ciclón”, para ser uno de los toreros más representativos del siglo XX, iniciando su andar como torero a los 14 años.
Matador a pie y a caballo, ya que una vez retirado (1953) como diestro a la usanza española, regresó a los ruedos como rejoneador. Su galanura le llevaron a actuar en dos películas mexicanas con temas de toros y en 1960 fue parte del reparto del clásico, El Álamo, cinta de John Wayne, donde representó al general Santa Ana.
Carlos Arruza tomó la alternativa en la plaza El Toreo, el 1 de diciembre de 1940, llevando de padrino a Fermín Espinosa “Armillita Chico” y testigo a Francisco Gorráez, con toros de Piedras Negras.
Confirmó el doctorado en Madrid el 18 de julio de 1944, teniendo de padrino a Antonio Bienvenida, hecho que se suscitó una vez que se derogó la prohibición como represalia por el apoyo que México prestaba a los exiliados republicanos de la Guerra Civil española.
En la plaza de Valladolid, el 19 de septiembre de 1944, realizó por vez primera el adorno denominado el teléfono, ante un toro de la ganadería Pablo Romero.
Con el “Mostro de Córdoba”, Manuel Rodríguez “Manolete”, alternó alrededor de 60 corridas de toros en 1945. Arruza fue también un prominente banderillero. Carlos Arruza falleció el 20 de mayo de 1966 en un accidente en la carretera de Toluca.

Rodolfo Gaona
(1888-5/20/1975)

Rodolfo Gaona, “El Califa de León”, que aún ya fallecido al escuchar su nombre retumban plazas y afición, nació en León, Guanajuato el 22 de enero de 1888, fue inventor de la gaonera (y del centenario). Se le considera uno de los toreros más elegantes de la historia.
Esta leyenda del toreo mexicano fue discípulo nada menos que de Saturnino Frutos “Ojitos” (banderillero de “Frascuelo”).
Fue durante muchos años una figura imprescindible del toreo, tanto en España como en América, llegando a rivalizar con figuras como Joselito y Belmonte. Se presentó en la plaza Monumental de México el 1 de octubre de 1905
Su alternativa tuvo verificativo el 31 de mayo de 1908, en Tetuán de las Victorias, Madrid, llevando de padrino a Manuel Lara “Jerezano”, ante toros de Basilio Peñalver.
La confirmación del doctorado se realizó el 5 de julio de 1908, teniendo de padrino a Juan Sal López “Saleri” y testigo Tomás Alarcón “Mazzantinito”, ante ganado de Juan González Nandín.
De igual forma, en 1908, el 15 de julio, inauguró la segunda plaza de Madrid, Vista Alegre.
Rodolfo Gaona vivió los mejores años de su carrera en México entre los años 1920 y 1924, teniendo como principales rivales a Ignacio Sánchez Mejías y Marcial Lalanda.
El maestro de León se retiró de los ruedos el 12 de abril de 1924, en la ciudad de México, en lo que fue una tarde que quedó marcada en letras de oro: estoqueó siete toros.
Rodolfo Gaona falleció el 20 de mayo de 1975, en esta capital.
Su vida privada tuvo dos motivo: la actriz española Carmen Ruiz Moragas, de la más tarde se divorció y Josefa Cabrera Llamas, con quien vivió el resto de sus días.