BAKÚ, Azerbaiyán.- El calor y el imponente trazado de Bakú inyectaron gran energía a Esteban Gutiérrez y el Haas F1 Team, que cumplieron con renovados ánimos el programa al ponerse en marcha el Gran Premio de Europa.

Después de una visita frustrante al frío de Montreal, el equipo dio vuelta a la página y se vio sumamente motivado en el estreno del circuito de 6.003 kilómetros y 20 curvas, donde este domingo se correrá la octava fecha del Campeonato del Mundo de Fórmula Uno.

No parece que los neumáticos vayan a ser un dolor de cabeza como lo fueron en Canadá, lo cual sin duda empuja al regiomontano a rodar en el monoplaza Claro-Telcel con mayor confianza en un circuito desconocido que debuta en el calendario de la máxima categoría.

Esteban se ubicó en la posición 14 y 15 en la doble sesión, con 51 giros completados.

Esteban Gutiérrez: “Fue un viernes productivo para nosotros. Tuvimos un buen programa y logramos completar todo lo que queríamos hacer. Fue muy interesante conocer el circuito. El coche parece estar comportándose bien y el agarre es mejor de lo esperado, por lo que es positivo para el fin de semana. Tenemos que mejorar por lo que necesitamos para asegurarnos de tener una buena configuración del coche para maximizar su potencial”.