En una época donde las defensivas han quedado de lado en la NBA, cada vez toman más protagonismo los grandes tiradores.

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Stephen Curry ha cambiado el juego, pero hay otro gran jugador contemporáneo que le ha seguido los pasos de cerca.

Damian Lillard es una súper estrella de la liga que se convirtió en el quinto mejor triplero de la historia, luego del tiro agónico que convirtió para que los Milwaukee Bucks derrotaran (143-142) a los Sacramento Kings.

El armador, de 33 años, llegó a 2,500 triples convertidos a lo largo de su carrera, para acercarse a los pocos obstáculos que tiene por delante.

Lillard se encuentra a solamente 60 triples del cuarto lugar en la historia de la liga, que es el ya retirado Reggie Miller (2,560). Un escalón por encima aparece otro jugador que está en activo como James Harden, quien acumula 2,845.

El segundo lugar de la clasificación está en poder de Ray Allen, quien se retiró hace algunos años con 1,973. En tanto que el récord se encuentra en poder de Curry con 3,554 triples.

Un poco más abajo del top-5, aparecen otros dos jugadores en activo como Klay Thompson (2,342) y LeBron James (2,338), que todavía pueden escalar en la clasificación.

Lillard todavía se encuentra vigente y es una de las mayores armas ofensivas de toda la NBA, con un tiro a larga distancia que lo ha hecho dejar su huella a lo largo de las 11 campañas que suma como profesional.

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