“MIS PAPÁS SE DIVORCIARON HACE 15 AÑOS, YO ESPERO NUNCA DIVORCIARME”: LUZ ELENA GONZÁLEZ
-OYE, Luz Elena, ¿tus papás se acabaron divorciando, o no?
“Sí, ya tienen muchos años divorciados, hace como 15 años. Mi papá se volvió a casar y rehizo su vida; es un hombre muy feliz, le tocó una buena mujer”.
-¿Tienes medias hermanas?
“No, mi papá es un hombre mayor, nunca tuvo más hijos, y mi mamá tampoco. La verdad es que así estamos bien”.
-¿Tu mamá también se volvió a casar?
“No, mi mamá dijo que en su vida se volvía a casar, que con una vez era suficiente; pero sí tiene su novio, al menos en estos 15 años ha tenido un par de relaciones o tres novios y con el que pensábamos que iba a durar más tiempo y se iba a quedar toda la vida, era tan celoso y la hostigaba tanto que dijo ‘no aguanto, me estoy asfixiando’”.
-¿Y lo cortó?
“Sí, le dijo ‘bye’. Entonces tiene su galán y todo; está muy contenta, pero cada quien en su casa, muy felices todos y muy tranquilos”.
-¿Y tú crees que te divorciarás algún día?
“Mira, es algo que uno nunca sabe, no lo piensas, uno se casa para toda la vida y luchas por tu matrimonio y esperas que la persona con la que estás también luche igual contigo por el matrimonio”.
-¿Pero ya te aseguraste, por ejemplo, de tener una casa a tu nombre?
“Bueno, sí, ya tengo mis cosas y mis propiedades; la realidad es que yo he hecho un patrimonio a lo largo de estos años de mi carrera y mi esposo dice que si en la vida no vamos a estar juntos, la casa que tenemos, bueno, el departamento donde vivimos, es mío”.
-¿Y nunca han pensado en el divorcio?
“No, nunca en el divorcio; sí hemos tenido etapas superfuertes donde también hemos recurrido a terapia de pareja por muchas situaciones, empezando por Santiago y porque aunque somos muy compatibles en muchas cosas, también somos diferentes en otras y pensamos distinto, entonces para poder educar bien a nuestros hijos, tenemos que estar en la misma sintonía y hemos acudido a ese tipo de ayuda para tratar de comprender y no quedarte con la soberbia de decir ‘yo tengo la razón porque a mí me educaron bien o tú tienes la razón porque a ti te educaron bien, entonces hemos complementado y dejando de lado la soberbia, los egos y decir que es lo mejor para nuestros hijos y también para nosotros”.