RÍO DE JANEIRO.- En la recta final de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro que cerró ayer para México con la medalla de bronce del boxeador Misael Rodríguez, el cuarto lugar de Paola Espinosa en clavados y el pesista Brendi Roque Mendoza por dopaje positivo de Izzat Artykov, de Kirguistán, son resultado de mejoría.

Carlos Padilla, titular del Comité Olímpico Mexicano habló de Misael Rodríguez: “Fue una medalla con un gran sabor de boca, porque Misael dio todo en el ring, como a todos nos consta, no salieron las cosas como hubiéramos querido; pero puedo decir que cayó con la cara al sol”, en una jornada que prometía buenas noticias.

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Sin embargo, en el taekwondo, Saúl Gutiérrez perdió en primera ronda, en el triatlón Crisanto Grajales se ubicó en la décimosegunda posición y la clavadista Paola Espinosa, en cuarto lugar, desde la plataforma de 10 metros.

“Estos son Juegos Olímpicos, vienen los mejores del mundo. México requiere de un nuevo proyecto deportivo que no permita ser roto en un momento determinado, que sea con un plan con un plazo mínimo de 15 años”, declaró el dirigente que asistió a la fosa de clavados para observar la competencia de Paola Espinosa.

“Lupita González tiene muchas posibilidades que esa espiral se voltee y luego el día 20 con María del Rosario Espinoza, siento que habrá una oportunidad para México, y con esto se sumarían tres medallas, una cosecha que es la media que hemos obtenido”, pero poner de límite las siete de Londres 2012.

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