Las puertas del Estadio de la Ciudad de los Deportes se abrieron este lunes para la Liga MX Femenil, pero esta vez el Clásico Capitalino fue diferente porque más allá de la sede, fue triste y descolorido en la tribuna, ya fueron muy pocos los asistentes; aún así, él triunfo fue del América (3-0) sobre los Pumas.

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Y la que normalmente es casa del Atlante y el Cruz Azul, ahora lo es para el América femenil. La escuadra azulcrema recibió a Pumas en una cancha que en realidad era neutral porque para ambas escuadras era desconocida, y que en la tribuna había muy poca afición de los dos equipos; sin embargo, las Águilas parecía que ya habían jugado ahí antes, pues por lo menos en el primer tiempo no le prestó el balón a Universidad.

El dominio azulcrema fue notorio desde el inicio, y fue hasta el minuto 11 del partido cuando Aurelie Kaci puso a las locales adelante; luego de un tiro de esquina, la francesa le pegó a la pelota como le llegó y de primera, sacó un rechazo imparable para la portera Heidi González.

Y pese a la ventaja, América no dejó de insistir, y una y otra vez pisó el área rival; sin embargo, Pumas debía agradecer la mala puntería azulcrema porque por más que Kiana Palacios y Katty Martínez intentaron, no concretaron ninguna de las opciones.

Pumas estuvo totalmente nulificado, sin nada al ataque, aunque en la recta final, Aerial Chavarin hizo la mejor jugada univeristaria en lo que iba del partido, pues logró llegar al costado derecho.

América trasladó el control de balón ante Pumas al marcador en el segundo tiempo

Arrancó la segunda mitad y la situación no cambió mucho. América dominaba y Pumas intentaba reaccionar, pero de ambos lados los técnicos hicieron cambios con la finalidad de ajustar sus líneas.

Y para los 76 minutos, América generó una jugada, y con el centro de Nicolette Hernández le mandó un centro a Sarah Luebbert, quien iba llegando al área por el centro, y definió de forma maestra marcando el segundo tanto azulcrema, y con el que se confirmó la superioridad americanista.

Pero ahí no terminaría la historia, pues en la recta final del juego, a minutos del silbatazo, nuevamente Luebbert se hizo presente en el marcador al empujar la pelota al fondo de la red universitaria.

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Con el triunfo en la bolsa, los óles se escucharon en los últimos minutos del partido en el que, América demostró que nuevamente fue superior a Pumas.