Acapulco, Guerrero.- Luego de un complicado e intenso cuarto día de pretemporada en Acapulco, Guerrero, los Pumas tuvieron el gesto de convivir con sus seguidores locales, y cumplir varios sueños a los más pequeños.

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El momento se vivió desde las 6:30 de la noche en la cancha de Pumas Diamante, donde el equipo realizó trabajo técnico a las órdenes del Turco Mohamed. Tras terminar la práctica varios aficionados los esperaron en un pasillo que dirigía a los jugadores rumbo al autobús que los llevaría de vuelta al hotel.

Como siempre, el más solicitado de todos fue Juan Ignacio Dinenno que de un momento a otro se vio envuelto entre un pequeño mar de niños que juegan en esa filial. Pero otro jugadores también causaron sensación como Julio González, ya que él nació en Acapulco, así como Gustavo del Prete y César “Chino” Huerta, que fue el último en salir y, por ende, el que más se tardó en subir al transporte.

CONTINUÓ LA INTENSIDAD EN LA PRETEMPORADA

Los universitarios iniciaron su día a las siete de la mañana con trabajo en el gimnasio de su hotel de concentración, y para las 8:30 salieron a la playa para realizar ejercicios de resistencia.

Corrieron una distancia de casi un kilómetro a la orilla del mar, y después se dividieron en cuatro estaciones donde jugaron voleibol, partidos de futbol a un toque, entrenamientos de velocidad y para los porteros algunas dinámicas para mejorar los reflejos.

Por la tarde tuvieron la práctica con balón en la cancha donde junto a los canteranos sub 18 y sub 20 se enfrentaron en un interescuadras, ante la mirada de ilusión de varios aficionados que acudieron para estar cerca de ellos.

Pumas continuará con su pretemporada en Acapulco hasta el próximo sábado tres de junio, cuando volverán a la Ciudad de México.

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