La vida le ha dado una oportunidad sagrada a Ronaldo Cisneros.

Después de que se le detectó un puente muscular en la arteria descendente anterior, el delantero no sólo corrió el riesgo de retierase, también de perder la vida en caso de que todo se complicara.

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Hoy, Ronnie está a unas horas de vivir algo que sólo en sueños pensó vivir: jugar una final del futbol mexicano.

En anteriores ocasiones, Ronaldo lo mencionó, su enfermedad, la misma que retiró a Sergio Agüero, lo hizo temer mucho. “El no volver a jugar fue lo a lo que más le tenía miedo”, dijo en el momento en el que dejó atrás su complicación cardiaca.

El agradecimiento a Chivas fue eterno, ellos le abrieron la puerta cuando nadie confió en sus capacidades. “Estoy muy agradecido con el club porque en ese momento tan difícil, me brindaron todo el apoyo para que yo pudiera estar aquí.

Estuvieron dispuestos a llevarme con los mejores doctores, incluso en Estados Unidos, siempre voy a estar agradecido con el club, con Amaury Vergara y con todas las personas que en ese momento me brindaron su apoyo”, dijo a medios locales.

LA CONFIANZA FUE UN FACTOR DETERMINANTE

La confianza del Rebaño Sagrado se transformó en goles. Ronaldo tomó el rol que el lesionado José Juan Macías dejó. Junto a Daniel Ríos, aportaron anotaciones en el ataque de Chivas, a un punto en el que ambos cambiaron las críticas por aplausos.

El clímax de Ronaldo con el jersey rojiblanco llegó ante América. Veljko Paunovic confió en él para iniciar como titular. El lagunero supo esperar su momento y tras una jugada individual del Piojo Alvarado, sorprendió a propios y extraños al dejar en el suelo a Sebastián Cáceres, quitarse a Luis Ángel Malagón y definir ante la puerta abierta.

La importancia de su presencia fue clave, Cisneros sacudió una segunda ocasión la red amarilla, pero un fuera de lugar evitó que pudiera convertirse en el héroe.

Al final, Chivas hizo la hazaña y se metió a lo que millones de aficionados le pidieron, la disputa por el trofeo de la Liga MX.

Tras el encuentro ante las Águilas, su emoción fue notoria. “Muy contento la verdad, muy orgulloso del equipo. Estoy muy agradecido con Dios. Este equipo ha madurado bastante. Mis compañeros y yo estamos muy contentos de estar en una Final, y vamos a luchar por ganar”.

En el último día, Ronnie atendió a sus aficionados en Verde Valle. Se acercó con la tranquilidad de saberse uno de los ídolos del actual plantel.

Su mente se tranquilizó cuando los niños lo reconocieron y pidieron firmas y fotos. Cisneros fue distinto a otros jugadores que ni siquiera voltearon a ver a los infantes.

Posó para la lente del Diario de los Deportistas con aquellos que lo arroparon en todo el proceso de su recuperación y que ahora lo quieren por su entrega.

QUERIDO POR LA AFICIÓN

La gente lo abrazó y junto al escudo de Chivas, siempre aplaudió el gesto. “Muchas gracias a todo, mañana vamos con todo”, dijo, mientras la gente le pedía dar el máximo.

Ronaldo también mostró su lado más Chiva. Se paró con la bandera en las manos y el escudo en la espalda, sabedor de la responsabilidad de portar los colores del equipo más popular del país.

Hoy, ante Tigres, Ronaldo y el Guadalajara tienen esa chance que tanto han buscado en los últimos años, levantar la 13, además de escribir su nombre con letras de oro en la historia tapatía.

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