POR DANIEL CHANONA
CORRESPONSAL

MADRID, España.- “No nos podemos relajar”. El mensaje de Marcelo es claro. Suena a advertencia para el Liverpool, rival en turno del conjunto español en la Champions League. El Real Madrid lo quiere todo. “Queremos mejorar cada día y cada partido. Estamos en un buen momento, aunque nos presionen en cada campeonato que disputa el equipo. Queremos estar mejor que el año pasado”. La Décima no basta.

“Queda mucho todavía para hablar de ganar la Champions”, aseveró con modestia el zaguero brasileño. “Nosotros hacemos el trabajo que nos pide el entrenador y no nos fijamos en otros equipos. Sólo pensamos en ganar nuestros partidos”.

Mentalidad que ya le sitúa como el quinto jugador extranjero con más encuentros disputados con la camiseta del Real Madrid (283), el sábado anterior en Los Cármenes superó al mexicano Hugo Sánchez: “Siento mucho orgullo de formar parte del Real Madrid y poder entrar en su historia. Me encuentro bien y mi objetivo siempre ha sido ayudar al equipo y jugar todos los partidos posibles. Estoy cerca de hacer historia, pero me entreno duro en cada entrenamiento y en los partidos doy lo máximo”.

Marcelo es de los pocos privilegiados que han compartido vestuario con Raúl González y Cristiano Ronaldo, ídolos del madridismo contemporáneo: “Los dos son increíbles. He tenido el placer de jugar con ambos. Raúl ha sido un capitán increíble y grandísimo dentro y fuera del campo. Son distintos, pero los dos tienen esa ambición por mejorar cada día y ayudar al equipo. Eso es lo mejor de los dos”.

En su corta comparecencia, tuvo tiempo para elogiar a James Rodríguez: “Es un grandísimo jugador. Es muy joven y tiene mucho tiempo por delante. Lo está haciendo muy bien y tiene el apoyo de todos nosotros. Sólo puede mejorar y crecer en el Real Madrid”. Así como a Mario Balotelli: “Es un grandísimo jugador y tiene mucha calidad. No le tenemos miedo, pero sí respeto”, de la diplomacia de Carlo Ancelotti, sus jugadores también aprenden.