Buenas noticias desde esta ciudad, en lo que fue el segundo entrenamiento del Tricolor con miras a enfrentar a Alemania, dentro de las semifinales de la Copa Confederaciones 2017: Javier Hernández regresó con todo a la preparación. Un día antes, en Kazán, entrenó por separado y bajo las órdenes del preparador físico, Vicente Espadas.

En esta ocasión, Hernández fue uno más dentro de los trabajos de calentamiento, el “torito” y tiempo después, el interescuadras.

Con apertura de 15 minutos para los medios de comunicación, la Selección Nacional entrenó en una cancha particular, a 15 minutos del parque olímpico, donde está su hotel de concentración.

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El combinado nacional trabajó por espacio de una hora y media, lo realizó con la mente puesta en Alemania, rival que por nombre es de llamar la atención.

Sin embargo, Hernández está de lleno, trabajó sonriente, es especial dentro del grupo, lo sabe Osorio y el resto del grupo. Es el Cristiano Ronaldo de los aztecas, así que con pamba, “calzón chino” y risas, le celebraron su regreso a los trabajos, ya que un día antes le dosificaron debido a los varios partidos sin descanso. Las buenas nuevas se asoman en el Tricolor desde Sochi. “Chicharito” está listo para entrarle a la batalla por el boleto a la final. Es el arma principal para desafiar a los alemanes.