Cuando  La Volpe dirigía a la Selección Mexicana lo vi explotar cualquier cantidad de veces. Tenía mucha presión encima y con su manera de ser, solito se generaba más presión. Siempre he pensando que es un gran estratega, que con la Selección hizo excelentes planteamientos, como cuando le ganó a Argentina en la Copa América, a Brasil en la Copa Confederaciones, y hasta cuando fue eliminado del Mundial de Alemania. Al menos lo hizo con más dignidad ante lo argentinos, en comparación a lo sucedido en Sudáfrica 2010, que fue una verdadera vergüenza.

Hoy, La Volpe ya no es el tipo explosivo de aquel Mundial. No faltaba la conferencia en la que se paraba y se iba porque las preguntas que le hacían no le gustaban y perdía el control fácilmente. Sabía que en cualquier momento sus declaraciones iban a generar todo tipo de comentarios, hasta que al cumplir su proceso en el Tricolor, la Federación dijo “no más”.

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Es cierto, le han faltado títulos, aunque también habrá que reconocer que le ha sobrado visión, porque supo detectar talento en el futbol mexicano y encaminó jugadores hasta consolidarlos. Después, en su labor como director técnico creó toda una escuela, porque no faltaba el futuro técnico que se acercaba al “lavolpismo” para enriquecer su conocimiento.

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Hoy, el propio La Volpe reconoce que el América no está jugando bien, porque sabe ser autocrítico. La necesidad de resultados ante la gran cantidad de bajas que ha tenido, lo llevaron a olvidarse del “cómo” para no fracasar este torneo y meterse a la Liguilla sí o sí.

El objetivo está cerca y una vez en la fiesta grande, el América tendrá que ofrecer algo más para aspirar al título que dramáticamente se le fue la Navidad pasada. De lo que pase ahora, dependerá el futuro de Ricardo Antonio La Volpe, porque los rumores son muy fuertes sobre el regreso de Miguel Herrera, quien no ha renovado con Xolos, situación que fortalece más el rumor. Mientras todo esto sucede, la directiva americanista parece estar en el “ojo del huracán”, lo cual no sería raro si el equipo estuviera fuera de la Liguilla, pero Ricardo Peláez sabe que es muy pronto para que ya se hable de su posible salida, cuando su éxito como directivo es indiscutible.

GRAN FINAL

Gracias a que Pachuca y Tigres llegaron a la final del torneo de clubes de la Concacaf, México garantizó de nuevo su presencia en el Mundial de Clubes a disputarse en esta ocasión en los Emiratos Árabes Unidos.

De lo que han hecho los equipos de la Liga MX en este torneo ya hemos hablado bastante. Llegar significa una larga travesía y casi siempre sabemos lo que va a pasar. Al que le va muy bien termina en tercer lugar y al que no, un sexto o séptimo lugar (último) sería su triste destino. Noticia bomba sería alcanzar la final, porque eso significaría eliminar al campeón de Europa, que es al que normalmente ponen en el camino.

Suerte a Pachuca y Tigres, cualquiera de los dos puede ir al Mundial a tratar de hacer historia y acabar con lo mismo de siempre.