La mala clasificación le costó caro a Checo Pérez. En el Gran Premio de Emilia-Romagna, el mexicano permaneció estancado por debajo del top cinco y por encima del noveno para terminar octavo en el trazado de Imola. Max Verstappen se llevó la victoria al sobrevivir a un feroz Lando Norris.

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En una largada inusualmente limpia, Pérez consiguió avanzar una posición después de dejar atrás a Daniel Ricciardo. Con los neumáticos duros. Red Bull pensó que el mexicano podría aguantar una sola parada con el desgaste que suele tener la pista del Autódromo Enzo y Dino Ferrari.

“Checo” supo aguantar. Llegó hasta el octavo escalón gracias a las salidas de Yuki Tsunoda y Nico Hulkenberg a los boxes. Pese a tener un ritmo constante. El mexicano comenzó a sufrir la degradación de las gomas duras cuando se pasó de la frenada y se salió de la pista en el vigésimo giro.

Aun así. La estrategia de los austriacos se mantuvo, había que esperar por un safety car para entrar a pits sin perder la posición y luego luchar por el podio. Pero ese escenario nunca llegó.

Checo logró ubicarse quinto tras la salida de Lando Norris al cambio de gomas. Pero en cuanto el británico regresó a pista rápidamente despachó al nacional. Lo mismo con Charles Leclerc, Oscar Piastri y George Russell. Simplemente el RB20 de Pérez no podía competir.

Al ver poco más que imposible la aparición del safety car por se una carrera sin muchos rebases. Red Bull finalmente cambió los neumáticos del mexicano por unos medios y el cambio fue al instante.

Checo se quitó de encima a Ricciardo y a Tsunoda para posicionarse octavo. Pero de ahí encontró un bache donde sacó hasta 13 segundos a su seguidor. Mientras que él estuvo casi en todo momento a más de 25 segundos de Lewis Hamilton en el siguiente escalón.

La parte emocionante de la carrera llegó en las últimas tres vueltas, cuando Verstappen comenzó a tener problemas de degradación y Lando Norris bajó la distancia hasta poco más de un segundo.

CHECO PÉREZ CRUZÓ LA META EN LA OCTAVA POSICIÓN

El británico solamente esperó un error del tricampeón del mundo para entrar en el rango de DRS, pero este nunca llegó y “Mad Max” impuso su ley con todo y sufrimiento. Sergio Checo Pérez cruzó la meta en octavo.