Cuando la NFL dio a conocer el calendario, pocos imaginaban que el partido de Jueves por la noche de la semana 14 enfrentaría a los Steelers ante unos Patriots desahuciados. Nueva Inglaterra se presenta en territorio Acerero con una marca de 2-10 y en esa frontera en la que parece más sencillo mirar hacia el futuro con la esperanza encontrar alguien que cambie su destino en el próximo Draft.

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Aun así. El espíritu competitivo de Bill Belichick suele suele salir a flote cuando tiene todos los reflectores encima. Y más si enfrente hay una franquicia como la de Pittsburgh que se juega la vida, y si no la vida, por lo menos gran parte de sus posibilidades de afianzarse en la zona de comodines.

Con marca de 7-5, los Steelers deberán confiar en Mitch Trubisky, quien saldrá de titular ante la baja de Pickett. El mariscal de campo enfrentará una dura prueba frente a una defensa que suele contener a sus rivales. En los últimos tres partidos, los Patriots han limitado al equipo contrario a no más de 10 puntos.

Por los Patriots, aunque no lo ha dicho abiertamente, Bill Belichick podría optar una vez más por Bailey Zappe como su mariscal de campo titular. El jugador de segundo año limitó errores ante los Chargers. Al no permitir intercepciones, sin embargo, el ataque se mostró anémico, al no poder anotar un solo punto.

Zappe completó 13 de sus 25 envíos para un total de 141 yardas.

La mala noticia para Nueva Inglaterra es que no podrá contar con su corredor estelar Rhamondre Stevenson. Por lo que Ezekiel Elliott gozará de buenas oportunidades. La defensiva de los Steelers buscará imponer condiciones, sobre todo con un TJ Watt que acumula 14 capturas de mariscal en lo que va de la campaña.

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