Tensión, molestia, hasta incertidumbre. Después de la tormenta en el Allegiant Stadium no vino la calma. La derrota 3-0 contra Estados Unidos fue un duro golpe para todos, jugadores, cuerpo técnico, directivos. El ambiente en el hotel de concentración del la Selección Mexicana en Las Vegas fue tétrico. Los futbolistas realizaron sus trabajos regenerativos en el interior del lugar y apenas se asomaron. Duilio Davino dio vueltas con visible enojo. El nuevo director deportivo de la selección mayor tiene su primera crisis demasiado pronto.

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Se esperaba una reunión entre Diego Cocca y Juan Carlos Rodríguez, sin embargo, el presidente de la Federación Mexicana de Futbol no apareció.

El ambiente no es el más sano, algunos jugadores están incómodos e incluso han pensado en abandonar la concentración de la Selección Mexicana tras el juego frente a Panamá por el tercer lugar de la Nations League y no participar en la Copa Oro.
La molestia principal de los futbolistas es el itinerario trazado, las distancias lejanas entre el hotel de concentración, el lugar de entrenamiento y el estadio. Traslados de casi una hora.
El enfado se agudizó tras la caída estrepitosa contra el país de las barras y las estrellas. La larga concentración de 42 días tampoco es bien vista, algunos jugadores comenzaron a juntarse desde el CAR y no van a tener días libres hasta que acabe el torneo del área, otros llegaron solo para la Nations League y Copa Oro. El cansancio mental también está presente.

México como es costumbre mantiene todo en hermetismo, sin embargo, es evidente que la relación entre Cocca y el plantel no es la más sana. El primer aviso de pequeños distanciamientos se dio luego del juego contra los del país de las barras y las estrellas. Los futbolistas se reunieron en el campo tras la derrota, pero el estratega no participó.
Jugadores como Jesús Gallardo y Ozziel Herrera mencionaron respaldarlo, sin embargo, lo que se ha visto es diferente.

El Tricolor juega el domingo contra Panamá por el tercer lugar de la Nations League, pero es lo de menos. El golpe está dado y puede desencadenar algo más grande. México inicia el 25 de junio su participación en la Copa Oro contra Honduras en Houston, pero no se sabe si va a seguir todo el plantel.

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