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1, marzo 2023 - 15:45

┃ José Ángel Rueda

María del Rosario Espinoza | Foto: Luis Garduño

Una vez finalizada su carrera como atleta de alto rendimiento, la triple medallista olímpica María del Rosario Espinoza tenía claro que su vida debía seguir girando en torno a los deportes. Así que no dudó cuando se le presentó la oportunidad de unirse al equipo de entrenadores comandado por Jannet Alegría al frente de la Selección Mexicana de Parataekwondo. Un reto que le permitirá vivir una nueva faceta dentro del olimpismo.

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Si el deporte a mí me transformó y me dio la oportunidad de salir adelante, de llevar a mi país a lo más alto, de que se diga algo de mi país, y pude dar mi granito de arena, imagínese con los chicos de para taekwondo, como las ha transformado, por eso fue mi decisión de estar estar en este equipo, porque es un equipo muy sólido y todos los días aprendo algo de ellos”, señaló la ahora entrenadora en un evento celebrado en el Centro Nacional de Alto Rendimiento, donde el presidente de la Federación Mexicana de Taekwondo, Raymundo González, hizo la presentación oficial de María como parte del equipo de entrenadores.

Consolidada como una de las atletas más importantes en la historia de este país, María del Rosario buscará aportar su experiencia. “Como atleta siempre me ponía mis objetivo corto y a mediano plazo, estar en lo más alto del podio, poner a México en lo más alto,pero los objetivos cambian, ya no se trata de mí, se trata de ellos. Quiero ser parte de una guía para que el día de mañana vean que todo lo realizado es gracias al esfuerzo, la constancia y la dedicación”, dijo.

Eso sí, se llega con la ilusión de sumar. “Me integro para apoyar tanto al equipo multidisciplinario como a los chicos, la cabeza sigue siendo la entrenadora Jannet Alegría. Hay grandes retos, me siento con la confianza y la motivación porque el equipo multidisciplinario me ha cobijado muy bien, creo que hay un ambiente donde la prioridad son los atletas, eso es algo que nos queda claro”.

El reto es grande, nosotros tenemos muy claro que debemos superar las medallas que se ganaron en los Juegos Parapanamericanos de Lima y ahora superarlas con Santiago. De igual manera los clasificados que tengamos para París. No son fáciles los retos pero tenemos ilusión y ganas de cumplir los objetivos”, agregó.

No será ésta la primera experiencia como parte del equipo paralímpico. Ya para Tokio, la medallista de oro en los Juegos Olímpicos de Beijing apoyó a los atletas en la parte anímica y mental, algo que le permitió, de alguna manera, cumplir el sueño de estar en tierras niponas, aunque no sobre el tatami.

Cuando me dio la oportunidad de estar en Tokio con ellos, yo sabía que ellos ya habían hecho el trabajo más complicado y simplemente yo apoyé en la última etapa, donde, con la experiencia que yo tenía en Juegos Olímpicos, trataba de transmitirles esa parte de qué es lo que ellos iban a vivir en los últimos días previos a la competencia, para mí fue una experiencia muy bonita, lo disfruté mucho, a pesar de que claro que me quedé con esa espinita de participar en los Juegos Olímpicos convencional, pero el parataekwondo me dio esa oportunidad de estar ahí”

Su retiro, un proceso doloroso

A pesar de que la idea del retiro rondaba por su cabeza desde el 2016, justo después de ganar la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Río, María del Rosario Espinoza aplazó seis años su retiro. Fue hasta el 2022 cuando finalmente decidió dar un paso al costado para enfocarse en su maternidad y desarrollar otras facetas profesionales, como la de entrenadora, empresaria, promotora deportiva y conferencista. La campeona olímpica del 2008 recuerda cómo fueron aquellos días.

Fue un proceso muy doloroso, pero también un proceso que me ayudó a tomar la decisión, tenía mucha gente a mi alrededor, mi familia, mi equipo, yo no dejaba la parte psiquiátrica, la cual me ayudó a superar ese momento. Yo sentía que me estaba divorciando del amor de mi vida, que era el deporte, el taekwondo. Muchas veces es miedo el retirarte, o el decir adiós”, explicó.

María del Rosario Espinoza oficializó su retiro en el Campeonato Mundial de Guadalajara, un evento marcado por el buen accionar del equipo mexicano, el cual ganó seis medallas, entre ellas tres de oro. Ya desde fuera vislumbra un buen futuro de cara a los Juegos Olímpicos de París 2024.

Hay un muy buen equipo, muy consolidado tanto con atletas como entrenadores, todo el equipo que los acompaña, es una de las grandes ventajas que ahorita tiene el taekwondo. Tienen los objetivos claros. Sin duda el objetivo de este ciclo es París, no es fácil, pero veo grandes atletas. Veo una gran posibilidad de que los chicos le den esa alegría tanto a México como al taekwondo de subirse a lo más alto del podio”, dijo.

La maternidad, un gran aprendizaje

Cerca del tatami, mientras María del Rosario Espinoza se desarrolla como entrenadora, su hija María Jannet la observa. Apenas tiene cuatro meses, pero el entorno le resulta familiar. La vida le ha cambiado a la tres veces medallista olímpica, quien disfruta de su maternidad en esta nueva etapa de su carrera deportiva.

La maternidad me ha transformado por completo, creo que lo más difícil fueron las primeras dos semanas que yo no tenía ni idea de cómo cambiarla, cómo bañarla, ni nada, pero creo que ha sido un aprendizaje de todos los días. A pesar de que mi hija ya tiene casi cuatro meses, todos los días he aprendido algo nuevo de ella”, explicó.

“Es un reto grande que tengo, porque yo trato de traermela a los entrenamientos porque todo el día estoy en el área, y trato de interactuar con ella, no perderme cada momento en el que ella va creciendo, va haciendo una sonrisa, o cada gesto que me va dando, ha sido un viaje increíble, pero sobre todo un aprendizaje como madre y como mujer”, agregó.

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