La invasión rusa a Ucrania dejó incontables historias de deportistas que tuvieron que dejar sus disciplinas para tomar las armas y la de Oleksandr Usyk es una de ellas. El peleador se sinceró en una entrevista con The Guardian y recordó algunos de los momentos que pasó el año anterior.

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“Todos los días que estaba allí, rezaba y pedía: ‘Por favor, Dios, no dejes que nadie intente matarme. Por favor, no dejes que nadie me dispare. Y por favor, no me obligues a disparar a otra persona”, expresó el ucraniano.

Usyk recordó cómo fue el día en el que la invasión rusa se desató, una historia que desafortunadamente comenzó el día del cumpleaños de su hija.

“Fue el 24 de febrero, mi hija Yelizaveta cumplió 12 años y, por supuesto lloró un poco. Mi esposa habló con ella y le explicó lo que había sucedido, y por supuesto lloró un poco. Mi esposa habló con ella y le explicó lo que había sucedido, y pronto mi hija entendió muy bien a qué nos enfrentamos todos”, dijo el campeón de los pesados de la WBA, IBF y WBO.

Cuando Usyk partió de Londres para ir al frente de la guerra y tuvo que explicarle a sus hijos “¿Por qué nos quieren matar?”

“Les explico a mis hijos que los rusos están tratando de matarnos porque son gente débil. También les digo que esta es la misma razón por la que no van a ganar la guerra. Somos más fuertes que ellos”, aseveró.

Además, expresó que tuvo problemas psicológicos y físicos, incluso perdió hasta cinco kilos en el primer mes en que estuvo al frente, pero reconoció que lo superó con mucha fe y confianza.

Finalmente relató el momento en el que su familia en Vorzel fue asaltada por soldados rusos, incluso usaron la casa como una base por un periodo corto de tiempo.

“Algunas personas no están haciendo lo suficiente para ayudar a Ucrania. Mucha gente está tratando de esconderse y simplemente esperar hasta que termine la guerra y esperar que no los toque, pero es no es posible, les acabará tocando de un modo u otro”, reconoció.

Peleará ante Anthony Joshua

El púgil quien además lanzó recientemente una colección de arte digital con la intención de recaudar dos millones de dólares para la Fundación Usyk, misma que ayudará a los ucranianos con atención médica, refugio y alimentos, sostendrá una pelea con Anthony Joshua el próximo 20 de agosto.

“Voy a boxear como si fuera una pelea normal, así que no sé nada de Joshua. Pero no seré tan bueno como en cualquier otra ocasión en la que haya peleado. Estare mejor”, sentenció.

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