Foto: Mexsport

Pumas perdió el invicto en la Corregidora, pero para Andrés Lillini, estratega de Pumas, su conjunto no fue ampliamente superado por Querétaro. Comparo la derrota con las del torneo pasado y dejó claro que estuvo lejos de parecerse en cuanto al dominio de sus rivales. Para él, les faltaron variantes e imaginaciones para abrir a Querétaro tras pasar tres cuartos del campo.

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“Flojito fue la semifinal, el 4-0 ante Cruz Azul, flojo fue el partido ante el León, el cotejo ante Juárez. Este partido no supimos destrabarlo, pero de ahí a que fuera un mal partido, no. Si el rival nos hubiera generado más opciones de gol y si nunca salimos del área, sería válido. No tuvieron más opciones de gol. Cuando te supera el rival, soy el primero en aceptarlo. Hoy sentí que no logramos hacer lo que hicimos las fechas pasadas”, dijo.

El estratega argentino aseguró que deberán trabajar a marchas forzadas para volver a ser ese conjunto que dio una buena muestra de futbol ante Xolos y que redondeó ante Mazatlán. Pese a que movió el dibujo táctico en más de una ocasión, no logró descifrar las debilidades de Gallos en el fondo.

“La generación del juego es un factor que debemos de mejorar. Nunca fuimos un equipo de muchos pases para generar el juego. Hoy, el rival, a partir del primer gol, fue complicado entrarle en situaciones por el centro. Nuestros volantes, en un inicio, fueron Waller y Vigon. No logramos destrabar esa complejidad que el adversario nos puso a la hora de defender. Nos faltó movilidad y ese pase en tres cuartos de cancha para habilitar. Son cosas que debemos de mejorar. El equipo lo intentó siempre. Estoy convencido de que Querétaro no fue superior. Habrá que hacer situaciones específicas en la semana para volver a lo que fuimos ante Mazatlán”, aceptó.

MOZO, CHICO DE EQUIVOCACIONES

Mucho eco hizo en la conferencia tras el partido el caso de Alan Mozo. Andrés Lillini, pese al linchamiento público, aseguró que, tras recibir su justa sanción, el club lo debe arropar, acompañar y enseñar para que no vuelva a cometer una indisciplina, independientemente de que ya es un reincidente en el tema.

“No me siento traicionado para nada. Es un ser humano y se equivocó en el momento en el que no tenía que hacerlo. Es momento de enseñar, de educar y de que recapacite. Tiene que volver estar dentro de lo que él estaba haciendo. Hacerle saber, de parte nuestra, que son situaciones muy complicadas que lo involucran a él y a mucha gente del club. Él estar en la mejor predisposición de aprender, pese a ser reincidente”, compartió.

Lillini confesó que en los dos casos recientes que presentó Mozo de fiestas, fue al primero al que le dijo la verdad y con el que se disculpó. Alzó la voz y mencionó que duda mucho que Mozo se pueda perder, sobre todo por toda la gente que tiene detrás y que lo apoya, en espera de verlo triunfar como futbolista de Pumas.

Pumas cae en su visita a La Corregidora

“La predisposición de Alan está. Al primero que le dice la verdad, fue a mí. Claro que pidió una disculpa, pero, como les dije, esas disculpas deben ser parte de renunciar a reincidir. Él tiene un futuro por delante que promete. Es un joven que tiene una familia que lo respalda. Estoy seguro de que tiene la capacidad de aprender. Él quiere ser un futbolista profesional y jugar muchos años en Pumas. El hijo se equivocó y el padre tiene que aplicar un castigo”, cerró.

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