Foto: AFP

El Barcelona y el Real Madrid, dos de los mayores clubes del mundo, deberán finalizar la temporada en silencio, obligados a jugar a puerta cerrada debido a la propagación de la pandemia del Covid-19.

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Cuando el próximo jueves vuelva a rodar el balón en la Liga española, el Camp Nou, el mayor estadio de Europa, con capacidad para 99 mil 354 aficionados, acogerá, en silencio, las hazañas de los jugadores culés; mientras que el Real Madrid abandonará el Santiago Bernabéu para jugar en su ciudad deportiva, donde habitualmente entrena, en las afueras de Madrid.

Acostumbrado a apasionadas noches de futbol, como la del 18 de diciembre con el clásico frente al Real Madrid y las reivindicaciones independentistas catalanas de fondo, el Barcelona deberá acostumbrare a jugar como local en un gran templo vacío.

Para los Culés, no será la primera vez: el Barcelona ya había ganado un partido de Liga española, contra Las Palmas, con el Camp Nou cerrado al público, el 1 de octubre de 2017, para protestar por la actuación de la policía durante un referéndum ilegal de autodeterminación en Cataluña.

Mientras, en Madrid, las obras que deben cubrir el Santiago Bernabéu con un techo retráctil y estructura exterior metálica han aprovechado el receso del futbol debido al coronavirus para avanzar la remodelación.

El último partido disputado en el Santiago Bernabéu fue el clásico contra el Barcelona, el 1 de marzo, y desde entonces el estadio ha estado cerrado.

Real Madrid contaba con que las obras continuaran a buen ritmo durante el verano, aprovechando la ausencia de los jugadores, pero con la finalización de la Liga española entre junio y julio, ha tenido que buscar alternativas.

Así, los Merengues han girado hacia su estadio Alfredo Di Stéfano, habitual sede de juegos del equipo filial, en su ciudad deportiva de Valdebebas, donde jugará los seis partidos que le quedan por jugar en casa.

Real Madrid acabará la temporada en ese pequeño estadio de 6 mil localidades, que también utiliza el Tacón, futuro Real Madrid femenil.

Una vuelta a los orígenes especialmente para el técnico Zinedine Zidane, quien antes de tomar las riendas del primer equipo dirigió en ese campo, durante dos temporadas, a los jóvenes del Real Madrid Castilla, en la Tercera División del futbol español.

Ante el cambio que supondrá para unas estrellas acostumbradas a jugar en los mejores estadios del mundo, el Real Madrid ya ha puesto manos a la obra para que sus jugadores estén lo mejor posible.

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Se ha colocado más iluminación para mejorar la retransmisión televisiva, se han puesto paneles publicitarios en los lados del terreno de juego y se ha trabajado para preparar lo mejor posible el césped.

El Real Madrid ha organizado un entrenamiento por semana desde finales de mayo en el Alfredo Di Stéfano para que los jugadores se acostumbren a su nueva casa y tomen conciencia de la posibilidad de ganar la Liga española en un recinto dedicado a una de las leyendas del club.