Lo que en otros tiempos era considerado un “duelo de hermanos”, para estas semifinales se trata de una serie entre clubes que no tienen nada que ver con ese pasado. Este Necaxa es el proyecto de empresarios que buscan hacerse paso en el futbol y que han comenzado de buena manera. Ahora tienen que enfrentar a un América que trata de rescatar lo que queda de los festejos por el Centenario.

Asegurar que el Necaxa no tiene nada qué pelear en esta serie es tan irresponsable como poner al América con pie y medio en la final. Ni directivos ni jugadores de las Águilas piensan de esa manera, después de lo que han visto de unos Rayos que no tienen ninguna presión y que todo lo que han conseguido es mucho más de lo que se esperaba.

Alfonso Sosa puede ser un novato en las Liguillas de la Liga MX, pero el aprendizaje y la experiencia que ha mostrado para esta competencia y después del fracaso con los Leones Negros merecerían un poco más de respeto; lo mismo sus jugadores, quienes han manifestado de todo en esos meses: desde proponer para llevarse un partido, hasta aguantar una ventaja para clasificar a la siguiente ronda.

Por el América todavía no estará Rubens Sambueza y aunque ya derrotaron al Guadalajara bajo esa condición, no deja de ser un duro golpe para lo que puede generar este equipo a la ofensiva, que en ese partido frente a Chivas, en la vuelta de cuartos de final, fueron solamente dos tiros a gol.

Luego está el mediocampo, en el que ha cambiado de jugadores, sin encontrar quién le pueda llenar el espacio de Sambueza. Ya lo probó, incluso, con Oribe Peralta como interior por izquierda en Guadalajara, pero el atacante estaba muy alejado de donde hace daño y no se veía cómodo. Quizá sea momento de que Osvaldo Martínez regrese a la titularidad y William da Silva suba unos metros en la cancha. Ya lo del carril por derecha parece no tener otras opciones que Ventura Alvarado o Gil Burón.

La última vez que se enfrentaron en una Liguilla fue en la final por el Verano 2002, que ganó el América. Ambos clubes pertenecían a la misma empresa y todo eso ha cambiado.

Eliminar al campeón Pachuca no fue poca cosa, con todo y el error de Óscar Pérez o la manera en que sufrieron en el segundo tiempo en el Hidalgo con los Tuzos sobre la portería de Marcelo Barovero, el héroe de Rayos. Hay algo que este Necaxa hace bien y es mantenerse sereno en momentos complicados, además de humildad.

Se tiene que recordar que en el once titular de los necaxistas juegan seis elementos de los que consiguieron el ascenso hace unos meses y aunque Edson Puch es el futbolista a seguir, el resto no desmerece en calidad y esfuerzo.

El árbitro será Jorge Isaac Rojas, quien a lo largo del certamen nunca le pitó al Necaxa y lo hizo en tres ocasiones para el América, con un saldo de una victoria, una derrota y un empate. La jornada 10 también se jugó en el Victoria, con empate a un gol. Ahora Necaxa necesita encontrar ventaja en el Victoria, sin descuidar el gol de visitante.

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