GUADALAJARA.- Luego del triunfo de Veracruz, las cosas se ponen más calientes en el tema porcentual para Chivas, pues este domingo por la tarde tendrán que enfrentarse al Puebla, un rival directo en la quema del descenso, y ante esta situación, el Rebaño no se ve presionado, sino todo lo contrario, ya que durante el entrenamiento las risas y bromas fueron el principal ingrediente.

En punto de las diez y media de la mañana, Guadalajara comenzó a afinar los últimos detalles, para enfrentar uno de los duelos más importantes, así que los tapatíos iniciaron con ejercicios de calentamiento, al trotar sobre las canchas de Verde Valle. Al finalizar ese trabajo el plantel se dividió en grupos de cuatro jugadores para realizar futbol en espacios reducidos, con el afán de mejorar en el toque y velocidad del balón, el cual generó algunos jugadores castigados por perder en el tenis balón, así como en el “torito”, lo que hizo el ambiente ligero y ameno.

Al concluir esta labor, el técnico del chiverío, Carlos Bustos, trabajó con el grupo la táctica fija, tanto en la ofensiva como en la defensiva, para no ser sorprendidos por los poblanos. Tiros de esquina y cobros de tiro libre directo e indirecto fueron en lo que más se enfocó el argentino, minutos antes de concluir con el entrenamiento Bustos practicó con algunos jugadores, Patricio Araujo y Fernando Arce los tiros libres.

Al concluir, Omar Bravo bromeó con algunos de sus compañeros, y observó por algunos momentos a algunos niños que jugaban en la cancha Fausto Prieto, se presume que eran sus hijos y sobrinos, quienes se divirtieron al máximo tirando a portería. (Tonatiuh G. Trujillo/Fotos: José Luis García)