Como viene ocurriendo año con año, cada 1 de julio entran en vigor las modificaciones que la FIFA hace a las reglas del futbol y en esta ocasión no fue la excepción.
Algunos de los cambios no son significativos, otros no le atañen al futbol mexicano y algunos, los menos, sí son trascendentes.

Por ejemplo, se autorizó que se le pueda comunicar al silbante, mediante el auricular la detección automática de un gol; situación, que no aplica en casi ningún país del mundo, como es el caso de México, debido a que no nos alcanzan los dineros para emplearla.

Aunque es una práctica universal desde hace muchos años, hasta ahora se les ocurre plasmar en la regla que cada equipo tendrá un capitán que deberá portar un brazalete. Igualmente, el gafete del capitán debe tener la letra “C”, debe de ser de un solo color y no debe hacer alusión a publicidad alguna.
Quizá una de las modificaciones trascendentes se refiere al hecho de que se podrá realizar una sustitución adicional a las cinco ya permitidas en el caso de que se presente una conmoción o un golpe en la cabeza.

Ahora, se les permitirá a los jugadores decidir el tamaño de sus espinilleras; es decir, el árbitro ya no andará de pilmama y la responsabilidad recaerá en cada uno de los futbolistas.

Una de las importantes se refiere al hecho de que, las manos sancionadas que sean accidentales; es decir, que no exista la intención de cometerlas deliberadamente (pero que, agranden el cuerpo) no serán causal de amonestación o expulsión. Quiero ver las polémicas que esta novedosa decisión va a traernos.

Un más, es aquella relativa a la ejecución de la pena máxima. Ya sabemos que todos los jugadores (a excepción del ejecutor y el guardameta) deberán de estar fuera del área y distanciados 9.15 metros del balón (función que cumple la media luna). Pues bien, si existe invasión del área (o de la media luna) y el “invasor” se involucra en el jugo o ejerce una influencia en el desarrollo de la ejecución o de las acciones siguientes, será penalizado. Si hay invasión; pero, no influye de manera alguna, no habrá sanción alguna.

También se menciona que el balón deberá de estar en el centro del manchón penal para el cobro de la pena máxima, lo que me parece intrascendente.
¿Cómo la ven, estimados lectores del Diario de los Deportistas? Yo opino que … ya dejen en paz al futbol.