Vuelta a la hoja

Dejemos a la Selección en el olvido por un momento, la goleada frente a Argentina no deja de ser un escándalo, pero también una buena enseñanza sobre todo para el “Tata” Martino, porque ya se dio cuenta de esa flaqueza que tiene nuestra Selección en ciertos partidos y también lo vulnerable que puede ser ante rivales que no perdonan.

Por si fuera poco, otra vez se habló de una fiesta, ahora durante la concentración del equipo en Nueva York. De inmediato Miguel Layún aclaró el asunto porque supuestamente había mujeres involucradas. La salida fue durante los horarios permitidos para tener una tarde libre, así que no hay tanto problema, aunque tampoco creo que exista tanta urgencia por salir a pasarla bien un rato. Los seleccionados sabemos que siempre están en el ojo del huracán y durante una concentración sería mejor cuidarse un poco y evitar lugares tan concurridos, pero allá ellos y sus ocurrencias.

Creo que Martino sabrá sacar las mejores conclusiones de esta derrota y vivió algo que para nosotros ya es común en el Tricolor: regarla feo después de haber mantenido cierta constancia en sus resultados y sus actuaciones.

Sin embargo, es tiempo de darle vuelta a la hoja y esperar octubre, mes en el que México tendrá tres partidos, un amistoso y dos más correspondientes a la Copa de las Naciones. Sí, esta vez serán rivales del área y ahí no hay tanto problema. Así que Martino, deberá pensar en alguna gira importante para corregir algo que normalmente no pasa frente a las Selecciones de la Concacaf: verse como equipo chico.

De tal forma que es momento de enfocarnos de nuevo en la Liga MX, mientras Martino analiza a fondo lo ocurrido. Por lo pronto, los Clásicos vuelven a llamar la atención. Dos buenos agarrones para este sábado, como lo son Chivas-Atlas y América-Pumas.

Con los problemas de porcentaje que tiene el Rebaño, Boy sabe que está obligadísimo a ganar, pero Atlas llega mejor. Misma situación del América contra los Pumas, duelo de vital importancia para los universitarios si quieren meterse, de una vez por todas, a zona de Liguilla. Dos clásicos explosivos.