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PARÍS 2024

Las reglas y los reglazos
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Eduardo Brizio

26, enero 2024 - 2:38

“Arrastrar” el prestigio

Existe una frase “impactante” (o al menos así me lo parece) en una de las canciones de Joaquín Sabina en donde el filósofo de Úbeda nos alerta: “Al lugar donde has sido feliz no debieras tratar de volver”.

La noticia convulsionó al balompié mexicano, los hijos pródigos: Javier el “Chicharito Hernández y Andrés el “Principito” Guardado regresan a jugar en el terruño querido, luego de su exitosa aventura por el viejo continente.

Javier, al inicio de su carrera, mientras jugó con El Rebaño Sagrado obtuvo el título de goleo. Militó en los mejores equipos del mundo: Manchester United, Real Madrid, Bayern Leverkusen, West Ham, Sevilla y Galaxy de los Angeles.

No solamente es uno de los dos únicos mexicanos (el otro es el Luis el “Matador” Hernández) que marcó 4 goles en partidos mundialistas; sino que, es el máximo rompe redes en la historia enfundado en la casaca nacional, al haber logrado 52 tantos.

Por su parte el “Principito” luego de jugar aquí con el Atlas cruzó el charco para enrolarse en: el Deportivo la Coruña, Valencia, Bayern Leverkusen, PSV Eindhoven y finalmente en el Real Betis en donde hizo huesos viejos al permanecer 8 años en la institución.

El “Chicharo” regresa con 35 años a cuestas luego de sufrir la lesión más temida por un deportista: la ruptura del ligamento cruzado de la rodilla.

Por su parte el “Principito” tampoco se cuece al primer hervor y llega a la edad de 37 años.

Guardado pertenece al selecto club de los futbolistas que han participado en cinco Mundiales; de modo que, con su llegada al León, los Panzas Verdes se convierten en el único equipo en el mundo que ha fichado a tres “cinco copas”, junto con Andrés: Antonio la “Tota” Carbajal y Rafael Márquez ¡Órale!

Los Caprinos le tienen preparada una apoteósica recepción a la “oveja descarriada que regresa al redil” (mejor dicho, a la chiva) el próximo sábado en el Akron y se habla de que los boletos están agotados y se cotizan en altos precios con la reventa.

Igualmente se elaboró una “edición especial” de 5 mil camisetas con el número 14 en los dorsales que “volaron” como pan caliente a pesar de que su costo oscilaba los 5 mil pesos

Y es aquí en dónde surgen las dudas y las preguntas: pero ¿Qué necesidad?, ¿Se pueden considerar “contrataciones bomba” (en lo deportivo o solamente en lo comercial) ?, ¿Nos debería preocupar que no surjan nuevos valores y se tenga que repetir la fórmula de repatriar futbolistas?, ¿Triunfarán? o vendrán a … “arrastrar” el prestigio.