Hoy es reconocido por su gran trabajo como preparador de porteros del Atlético de San Luis, pero hace algunos años, Marcello Capirossi también estuvo bajo los tres palos de manera profesional. Comenzó su carrera en Pumas, aunque los mejores momentos de su vida como futbolista los vivió lejos de casa, en la Liga Deportiva Universitaria de Quito.

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Capirossi tuvo su primer acercamiento con el futbol en el América. Con la ‘cosquillita’ de ser portero, cuenta en una entrevista para el portal casasdeapuestas.bet que su papá convenció a Panchito Hernández de ponerlo en el peor equipo que tuviera disponible. Aquel cuadro que solía ser goleado, con Marcello en la puerta ganó 2-0. La jugada le salió mal a su padre, pues se terminó por enamorar más del arco.

A pesar del paso por América, su carrera la comenzó en Pumas. Sin embargo, las cosas no salieron del todo como lo esperaba. Recaló en el Pachuca y luego de descender decidió optar por sus raíces. Se fue a Ecuador para seguir su carrera y no se equivocó, allá viviría su mejor etapa.

“(En Pumas) nos pusieron a todos transferibles. Hablé en ese entonces con el Doctor Arce que era el encargado de las Fuerzas Básicas y me dijo: no te preocupes, en teoría el que tiene que salir es Sergio Bernal que tiene muchos más partidos en primera. Y pues nada, resultó que me compró Pachuca, pasó el descenso y no quise seguir ahí, tuve que parar para recuperar mi carta y luego surge la posibilidad de ir al Ecuador y me pareció interesante, tenía 23 años en ese entonces y me gustó la idea”, explicó.

¿Cómo se dio la llegada de Marcello Capirossi a Ecuador?

Tras salir del Pachuca, Capirossi se encontró con la posibilidad de ir a Ecuador, donde un tío lo ayudó a colocarse. Incluso, en su nuevo club le pidieron optar por la doble nacionalidad para jugar.

“Por la nacionalidad de mi madre es que en 1995 decido irme al Ecuador a probar suerte con la ayuda de un tío que en paz descanse y llego a Liga de Quito, me vieron, hice la prueba y me piden para no ocupar plaza de extranjero si podía optar por la doble nacionalidad”, expresó.

“Deportivamente hablando, sí, fueron muy buenos años. Eso me valió para regresar en 1997 a Santos Laguna. Había grandes diferencias desde el número de equipos, en Ecuador eran 12 y acá eran 20 si bien recuerdo. Cuatro o cinco equipos allá peleaban por el campeonato, pero el nivel de jugadores era muy bueno, en ese entonces me valió para llegar a una convocatoria de Selección de Pancho Maturana. Siento que sí había diferencia, pero se vive muy intensamente el futbol allá, me sirvió mucho esos años allá”, agregó.

¿Por qué se retiró Capirossi?

Capirossi cuenta que una lesión en la espalda lo llevó a tomar la decisión de dejar el terreno de juego. Colgó los guantes a los 33 años, por lo que de inmediato pensó que seguir en el futbol era la mejor opción.

“Nunca estás preparado para retirarte como jugador. Me retiro por un tema de espalda. Hablando con los arqueros que he trabajado, hoy en día los cuidas y tratas de alargarles la carrera, pero en esa época entrenabas muchas veces en canchas de tierra y tus años deportivos se acortaban”, expresó.

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“Cuando me retiro sí pensé en continuar dentro del futbol, me retiré a los 33 años, relativamente joven. Aplico para hacer el UEFA B en la federación italiana y me aceptan, ahí pude empezar a hacer mis pinitos en la parte de cuerpo técnico y al regresar el presidente de Liga de Quito me ofrece empezar con los arqueros de fuerzas básicas”, cerró.