Boca Juniors cayó ante el Fluminenese en el Estadio Maracaná perdiendo la esperanza de conseguir su séptimo Copa Libertadores en la historia, pero una de las cosas que más sorprendió a los espectadores del duelo entre el Xeneize y El Flu fueron las historias de cómo los argentinos llegaron a Brasil.

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Una de las que más conmovió y consternó al público en general fue la de un niño, quien vendió su Playstation y la moto de su padre para asistir a las afueras del estadio, sin importarle que no tuviera boletos para ingresar.

“Rifamos la moto de mi papá, rifamos mi play y no tenemos ni entrada, pero mirá lo que es esto, esto es Boca, loco”, fueron los comentarios del pequeño que dejó con la boca abierta a todos aquellos que pudieron apreciar el video.

Lamentablemente para su causa, el niño tuvo que ver çómo de manera dolorosa, el Xeneize cayó en el tiempo extra con un gol de antología del Fluminese por parte de Kennedy.

Pero no fue la única historia que dejó el Boca Juniors en la final de Copa Libertadores, pues además del infante hubo un estudiante que gastó el dinero de las dos becas que se le entregan por desempeño académico para poder asistir al que en teoría era el encuentro más importa para su equipo.

El futbol es un deporte que desata mil y un pasiones, pero en Argentina se vive distinto y si, no se puede explicar porque es algo que se tiene que vivir.

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