San José del Cabo.-En tres palabras, Santiago González define su carrera como felicidad, tristeza y constancia, y justamente en ese último calificativo es en el que radica su éxito, pues para convertirse en el tenista que hoy pelea por entrar al top ten del ranking de dobles de la ATP. El veracruzano tuvo que pasar por varios baches que casi lo hacen desistir, pero como a todos, la pandemia le cambió la vida y le entregó ese “tercer aire” que hoy lo coloca como uno de los mejores doblistas del mundo.

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“Siempre hay baches porque de repente, cuando no ganas, empiezas a pensar cosas de tu edad. Yo pensaba que a los 39 ya iba a colgar la raqueta, pero bueno, tuve un tercer aire por así llamarlo. Después de la pandemia que empecé a jugar con Molteni, comencé a jugar muy bien. Creo que me hizo bien estar en casa seis meses por primera vez en toda mi vida, lo disfruté y de ahí empecé a ver las cosas de diferente manera, como mucha gente; encontré una gran pareja con Molteni y luego encontré una gran pareja con Edouard, ahora estoy disfrutando tenis al máximo”, dijo en entrevista exclusiva con ESTO, tras ganar el Abierto de Los Cabos.

Ahora mismo Santy pelea por quedar en las Finales que se celebran a final de año, sería la primera vez en su carrera que lo consigue, y aunque aún no amarra la clasificación, el mexicano se mantiene quinto junto a Edouard Roger- Vasselin, por lo que es cuestión de un par de torneos más para firmar su boleto a Turín.

Sin embargo, llegar hasta este punto no fue nada sencillo, Santy González tuvo que saborear el fracaso, reinventarse y trabajar sin descansar hasta encontrar un punto que le hizo comenzar a obtener resultados.

“Es un maratón, obviamente inicias el sueño como singlasta, estuve jugando muchos años como singlista y alcancé a jugar Wimbledon, fui 150 en la ATP, jugué Copa Davis y luego hice la transición al dobles. La verdad es que ha sido una carrera fantástica y lo mejor de todo es que todavía puedo dar más, todavía tengo grandes objetivos, quisiera ser top 10, quisiera ganar un Grand Slam, quisiera estar en el Masters de Turín, quisiera seguir ganando títulos. Me quedan un par de años más y los estoy disfrutando muchísimo con mi familia a lado y lo que me quede, sea uno, don, tres o cuatro años, lo haré al máximo”, señaló.

Tras más de dos décadas de carrera, Santy se encuentra en el momento más alto, el que tanto deseo y lo reconoce sin dudar: “es el mejor momento de mi vida”. Al mexicano se le pudo ver en Los Cabos sólido en la pista, pero también se dio tiempo para pasear por los pasillos del complejo junto a sus hijos, mirar el tenis en el Match Hospitality con su familia y al final, coronarse frente a una multitud que lo único que necesitaba era saborear un triunfo del que es, por mucho, el mejor tenista mexicano del momento.

“Sin duda es un momento mágico para mí, seguramente el mejor momento de mi carrera, me siento en el mejor momento de mi carrera y también en el mejor momento de mi vida, yo creo que estar aquí con mi familia y con mis amigos y todo lo que conlleva eso; con mis papás que también que estuvieron toda la semana acá, la pasamos muy bien y estoy muy contento de estar aquí, de ganar en casa, el primer trofeo en casa, mi título 21 y no queda más que disfrutar este momento y recordarlo para toda la vida”, contó a ESTO.

A sus 40 años, González está más cerca de ganar un Grand Slam que del retiro. En Los Cabos logró el título que ansiaba en casa y por ahora no le queda más que seguir, pues sin importar lo difícil que se ponga el camino, el mexicano luchará por alcanzar todo ello que siente que aún tiene pendiente en su carrera, pues ya “después habrá tiempo de descansar”.

CONEXIÓN A LA PRIMERA

A Santiago González se le vio jugar en compañía de Eduouard Roger-Vasselin a partir de este año y desde entonces, el mexicano encontró al cómplice perfecto que le ha hecho dar su mejor tenis para juntos conquistar ya tres títulos, incluido el Masters 1000 de Miami, el que hasta ahora es el trofeo más importante para el mexicano.

Aunque parece que han jugado juntos por años, la verdad es que la conexión se dio desde el primer momento que saltaron juntos a la pista, de “emergencia” en Indian Wells.

“Yo venía de jugar con Molteni y la verdad es que lo estábamos haciendo bien, ganamos cuatro o cinco títulos juntos, pero el año pasado en Indian Wells por el ranking con Molteni no entré, Edouard tampoco entraba, así decidimos jugar juntos y a partir de ese torneo llegamos a la final y le ganamos a dos o tres parejas de las mejores del mundo. Lo mismo pasó en Cincinnati y volvimos a hacer semifinales.

Al final del año nos sentamos a platicar y pensamos que lo podíamos hacer muy bien y decidimos jugar juntos desde enero y creo que fue una gran decisión. Nos complementamos bien juntos y hemos ganado tres títulos, grandes torneos, grandes partidos y todavía creo que podemos seguir desempeñándonos bien y llegar al Master de Turín”; cerró González.

La próxima parada para el mexicano y el francés será el Masters de Canadá, sonde ambos buscarán sumar el mayor número de puntos posibles que les ayuden a amarrar el ansiado pase a la Finals y por qué no el cuarto título del año.

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