El último aliento de los aficionados a sus ídolos llegó. La gente se dio cita en el hotel de concentración del Guadalajara, pero los dejaron plantados. Cerca de 300 aficionados llegaron al sitio donde Chivas durmió previo a la final, y pese a que apoyaron durante más de tres horas, la recompensa nunca llegó.

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El plantón fue duro, la gente se ilusionó y llegó alrededor de las siete de la noche al hotel donde los tapatíos concentraron. La llegada del camión estuvo prevista a las 19:30 y así fue, pero no arribó por donde generalmente lo hace, la puerta de entrada estaba tapizada de rojo, blanco y azul, pero el Rebaño decidió entrar por la zona trasera del recinto.

Los jugadores se apuraron a entrar, fueron pocos los aficionados que pudieron verlos por unos segundos. Chicote Calderón y Nene Beltrán fueron los que sólo levantaron el brazo y corrieron.

La gente se esperanzó, el momento para ver a sus ídolos llegó. Los cánticos característicos de la barra sonaron, pese a que los integrantes de la porra no se hicieron presentes. “Dale, dale, dale Rebaño”, “Vamos Rebaño, queremos la Copa” y el clásico “Chivas, Chivas”, arribaron al lugar. El ánimo fue el mejor, pues si bien supieron que los protagonistas todavía tenían que ingerir su cena, esperaban que fuera un hecho que los salieran a saludar, al menos unos segundos.

La seguridad del hotel hizo el primer guiño de que no habría nada. Dejaron abierta la zona del estacionamiento y cualquiera podía entrar hasta la zona de lobby, aunque ahí pedían la llave o una clave de reservación para dar ingreso.

APARECIERON CANCIONES DE CHENTE EN LA SERENATA DE CHIVAS DE LA FINAL

Las canciones de Vicente Fernández se entonaron durante varios minutos. Una hora y media había pasado y nadie se hacía presente. Muchos desistieron cuando las dos horas se cumplieron, pero los más fieles se quedaron para alimentar su propio sueño de encontrarse con Alexis Vega, Víctor Guzmán y compañía.

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Los minutos continuaron su andar, el reloj marcó las 21:30 cuando los hombres encargados de la seguridad resguardaron la entrada y fue entonces que todos esperaban la salida de, al menos, Veljko Paunovic.

La espera se alargó hasta las 22:30 horas, pero los jugadores o el técnico, nunca salieron. El plantón no fue mal visto, al contrario, buscaron comprender que la concentración ya había comenzado. Los aficionados comenzaron a retirarse y prometieron alentar a todo pulmón en el día del partido.

HABRÁ CARAVANA DE LOS AFICIONADOS

La barra de Chivas convocó a los aficionados a una caravana desde el parque rojo, ubicado a unos 17 kilómetros del estadio Akron, para alentar al equipo en un recorrido lleno de color y sabor rojiblanco.

Se espera que los aficionados cierren la avenida Vallarta y lleguen al redil en alrededor de hora y media de caminata. Los cuerpos de seguridad resguardarán el recorrido y evitarán desmanes.