Contrariada se despidió del Abierto de Monterrey 2023 la tenista mexicana Fernanda Contreras y no es para menos, feliz por el esfuerzo realizado a lo largo de la semana y por el hecho de alcanzar su primera final dentro del circuito de la WTA, pero la tristeza la invadió porque perdió en casa, en México.

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La potosina admitió tristeza por la derrota, es obvio que a nadie le gusta perder, sin embargo, rompió los pronósticos en este certamen categoría WTA250 pues alcanzó la final en la modalidad de dobles, llegó mucho más lejos que lo que se esperaba, incluso avanzó más de lo que se presupuestaba en singles, donde jugó gracias a la wild card y perdió en primera ronda contra la canadiense Rebecca Marino.

“Me voy con un sabor muy padre. Fue un día duro perder en el estadio mexicano, no es fácil, me siento medio triste porque no les pude dar la copa”, manifestó la jugadora tricolor para el diario ESTO.

Pese al descalabro en la final de dobles a lado de la australiana Kimberly Birrell, Contreras Gómez valoró el esfuerzo. “Aun así fue una semana espectacular peleando mucho, sabemos que no fue un pase sencillo esta semana, entonces estoy feliz de toda la lucha que tuvimos para llegar a este momento”.

Antes en la cancha principal tras culminar el partido ante las colombianas María Paulina Pérez y Yuliana Lizarazo, quienes se adueñaron del título con parciales de 6-3, 5-7 y 10-5, la mexicana con el plato de plata en mano que la acreditó como subcampeona señaló.

“Gracias a todos por venir, por estar aquí, por apoyarnos. Felicidades, Colombia se lo merecen, jugaron súper bien. Gracias a todos los que hicieron todo esto posible, muchas gracias por este súper torneo que es uno de los favoritos de todas las chicas de la WTA y muchas gracias a ustedes público que hacen esto posible”.

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