El tiempo se le agota al Potro Gutiérrez. Un inicio desastroso en el Clausura 2023 con apenas un punto de 12 posibles y un partido pendiente, que tiene a Cruz Azul en el penúltimo lugar de la clasificación ha puesto en la cuerda floja al director técnico mexicano.

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Su puesto continúa en estudio, pero será él quien termine por sufrir las consecuencias de una mala planeación en todos sentidos dentro de la institución. El equipo no se reforzó como lo pidió y un cambio en el banquillo sería la opción más fácil de tomar, tal y como se acostumbra en nuestro futbol.

Los nombres de su posible reemplazo han empezado a sonar. Ricardo Ferretti y Juan Francisco Palencia son los más cercanos. La directiva cementera ya sondea esas opciones, pero puede ser después del duelo en el Infierno, de la sexta jornada del certamen, cuando en La Máquina tomen la decisión de destituir a su actual timonel si no consigue el triunfo ante los Diablos Rojos.

Los tres puntos serán obligados en el estadio Nemesio Diez, pero de no conseguirlos se viviría un cambio más en los rumbos de La Noria. Algo que se ha convertido en una costumbre en los últimos tiempos, a pesar de que la novena estrella se consiguió a mediados del 2021.

Si el Potro no continúa en la dirección técnica celeste, quien llegue como reemplazo será el sexto entrenador en el conjunto cementero en los últimos cinco años. De esa forma, Cruz Azul se convertiría en la quinta institución con más movimientos en un lustro y la segunda entre los clubes más grandes del balompié nacional.

Pedro Caixinha comenzó su gestión a finales del 2017 y fue destituido en septiembre del 2019. El portugués duró 1 año 8 meses. Después le siguió Robert Dante Siboldi. El uruguayo formó un gran plantel, pero sólo duró 15 meses y renunció después de la penosa remontada que sufrió ante Pumas y de ser públicamente exhibido por el presidente Víctor Velázquez.

Su reemplazo tardó casi un mes y un histórico como Juan Reynoso fue el elegido. El peruano rompió con más de 23 años sin título de Liga, pero no fue suficiente para un proceso más largo y después de 1 año y 4 meses salió por la puerta de atrás. Diego Aguirre llegó como flamante reemplazo, pero su gestión terminó con más pena que gloria después de únicamente dos meses. La goleada sufrida ante América (7-0) rompió con todo. En ese momento, Raúl Gutiérrez entró como interino y un torneo después fue oficializado, pero su tiempo pende de un hilo.

De esa forma sólo Chivas (7), y clubes de menor jerarquía como Necaxa (7), Querétaro (7) y Tijuana (8) son los que han sufrido más cambios de timonel, pero ni Mazatlán, Puebla, Juárez o Atlas juntan los que tendrán en La Noria si se toma la última decisión.

El entrenador está consciente de la situación. “Son de esas cosas que son parte del futbol, son gajes del oficio. Trataremos de minimizar esa parte, siempre ganamos y perdemos todos. Es más fácil cortar una cabeza que treinta. Yo sigo viendo un equipo comprometido, que desea hacer bien las cosas”, expresó en su última conferencia de prensa. “Estar en un equipo de Cruz Azul genera esos escenarios, estamos acostumbrados. Hasta hoy tenemos ese respaldo de la directiva para seguir, todo lo demás han sido dimes y diretes que se empiezan a hablar”, añadió de forma serena.

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El futuro del Potro en Cruz Azul no es seguro y en próximos días puede haber noticias no tan gratas en su carrera.

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