JAVIER JUÁREZ

FOTO: RAMÓN ROMERO

Cruz Azul tiene que buscar su boleto directo a fase final en la última fecha, sin embargo, con ganarle a Pumas no es suficiente, el 1-0 que logró León en el estadio Azteca puso en aprietos a los cementeros, la Máquina bajó al sexto puesto con 23 puntos, Tigres (25 pts.) y Toluca (24 pts.) los superan, mientras que Monterrey (21 pts.) y Puebla (21 pts.) les pisan los talones, quedarse con uno de los cuatro pases directos luce imposible para los celestes, el triunfo y la suerte tiene que estar de su lado. La noche fue gris para los locales, la derrota fue acompañada por el gritó discriminatorio, Fernando Guerrero tuvo que activar en dos ocasiones el protocolo.

León fue el beneficiado, los esmeraldas subieron al tercer lugar de la tabla general y tienen amplias posibilidades de quedarse en esa posición o subir, la Fiera no ha desplegado su mejor futbol, eso es cierto, existen reclamos de sus aficionados, sin embargo, los puntos que tienen les alcanzan para estar en las alturas.

El triunfo felino se fraguó desde el primer tiempo, Ariel Holan con un movimiento logró un mejor futbol, Santiago Ormeño acompañó a Víctor Dávila, jugar con dos puntas es raro para los esmeraldas, Ángel Mena y Omar Fernández hicieron un bloque más peligroso, la defensa celeste no supo cómo detener a los jugadores esmeraldas.
La Fiera generó jugadas de peligro en el área cementera, Cruz Azul también, sin embargo, Rodolfo Cota congeló los disparos que le hicieron.

Juan Reynoso no contó con Jonathan Rodríguez, la baja del Cabecita era esperada, el maquinista tuvo que echar mano de Santiago Giménez para estar enfrente.

El juego fue parejo, hubo intensidad, pero falto claridad, la cantidad de pases errados fue alta.
León insistió hasta que Víctor Dávila le elevó un balón a Omar Fernández, el colombiano centró raso, Nacho Rivero quiso despejar el esférico, pero lo rozó y lo dejó servido para que Andrés Mosquera lo metiera a la red, la Fiera tuvo suerte, sin embargo, el tanto fue merecido.

A partir de ese momento los cementeros se le encimaron a los verdiblancos, sin embargo, la claridad siguió ausente.
Reynoso tuvo que hacer cambios para rescatar el empate, Juan metió a Yoshimar Yotún y Brayan Angulo, el mensaje fe claro, meter músculo, pero también ser insistentes enfrente.

León encontró huecos que lastimosamente Ormeño no les supo sacar provecho, el antes jugador de Puebla está lejos de su mejor nivel. Santi salió del campo para dejarle su lugar a Emmanuel Gigliotti. Ariel Holan también le dio espacio a Jean Meneses.

El técnico celeste metió de manera desesperada a Rómulo Otero y Lucas Passerini, dos futbolistas con poca participación, pero que era necesario ponerlos en el campo.

La desesperación cementera se prolongó a la tribuna y la gente comenzó a gritar la palabra discriminatoria. Fernando Guerrero tuvo que detener el partido tras el tercer grito. El protocolo se activó en dos ocasiones.
El Cantante agregó 11 minutos, la Máquina se dedicó a mandar centros, la tensión estuvo presente, hubo un poste de Luis Romo, una falla de Passerini, pero el balón nunca entró. Ese fue el final.

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