La historia que vivió Lucero Álvarez hace casi un año parecía repetirse.

Este sábado, tras un choque con el “Maza” Rodríguez, el guardameta de Lobos BUAP tuvo que salir de cambio por un fuerte golpe en la cabeza en el primer tiempo del encuentro contra Cruz Azul.

El uruguayo se levantó después, pues la jugada en su área continuó, pero apenas se deshizo del peligro se dio cuenta de la sangre que recorría su rostro, golpeó el poste con coraje y fue él mismo quien pidió las asistencias médicas antes de tirarse al suelo.

El enojo de Lucero al saberse lesionado… otra vez!!!@estoenlinea pic.twitter.com/vpRs7cJqUq

— Salvador Aguilera (@AguileraESTO) 7 de abril de 2018

La lesión no le permitió continuar en el partido y muy molesto subió al carrito, ya con un vendaje en la cabeza. Lo llevaron a la banca visitante del estadio Azul para que ingresara al vestidor, pero él prefirió quedarse arriba. Ahí, el técnico interino Daniel Alcántar quiso darle la mano para animarlo, pero el arquero le mentó la madre. Estuvo unos cuantos minutos y después ingresó al vestidor.

Hace casi un año, en un duelo contra Querétaro en el estadio Corregidora, el guardameta chocó con Everaldo Stum en una salida en la que intentó despejar el balón con los puños. Tras el cabezazo, Lucero cayó inconciente.

Tras este suceso, por el que casi pierde un ojo, el uruguayo estuvo más de dos meses fuera de toda actividad por una triple factura de pómulo por la que fue intervenido. (Violeta Alva)