La vida de María del Rosario Espinoza cambió en el momento en que tuvo en sus brazos a María Jannet, su hija de dos años de edad. Antes, el 10 de mayo le tocaba festejarlo al lado de sus familiares y ahora ella es la celebrada.

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La triple medallista olímpica en taekwondo desea ver a su pequeña bailando en un festival, festejando el día el Día de las Madres, un sueño que pronto se le cumplirá.

“Siempre festejaba a mi mamá, festejaba a mis tías, festejaba a las mamás que estaban a mi alrededor. Pero se siente diferente y raro cuando dices ‘bueno, ahora yo ya estoy en esta etapa donde me celebran, me festejan como Día de las Madres‘ y el tiempo pasa rápido”

“El primer año fue extraño, pero ya el siguiente año me sentí como pez en el agua. Los festivales sí me los imagino. Y me encantaría vivirlos, tener ese espacio, ese tiempo para estar con ella. Me han tocado pocas actividades en la escuela donde va, pero es claro que me lo imagino y que lo deseo también“.

¿Cómo cambió la vida de María del Rosario Espinoza a partir de que se volvió mamá?

La vida de madre no ha sido sencilla para la entrenadora de la selección mexicana de parataekwondo; y es que son constantes los viajes internacionales que realiza para estar al lado de sus deportistas.

“Un hijo para todo mundo es complicado, por los tiempos y más porque yo también estoy con el equipo Para Taekwondo por los viajes que se hacen al extranjero, afortunadamente también el equipo me da ese tiempo de estar con mi hija, dedicarle más tiempo, pero de que ha sido pesado es pesado, pero creo que para todo padre es pesado.

“Es cuestión de programarme mejor para tener tiempo para ir, sobre todo mis tiempos y los tiempos de la niña, sí he tenido un cambio, el cual nos hemos adaptado tanto de una parte como la otra”.

La monarca en el Campeonato Mundial de Taekwondo 2007 reconoció que uno de los momentos más complicados que vivió fue cuando realizó su primer viaje y tuvo que dejar a María Jannet.

“Fue el viaje más complicado porque la extrañaba mucho y sentía que la estaba dejando. A partir de que soy mamá me da mucha nostalgia el salir de viaje, el regreso no, pero el salir sí, hasta lloro casi en los viajes, pero es más que nada como que añoro mucho y que siento que voy a estar lejos de mi hija”.

Sueña con ver a su hija como deportista de alto rendimiento

María del Rosario ha llevado a su pequeña a los entrenamientos de la selección mexicana de Para Taekwondo, y a María Jannet le agrada convivir con los deportistas. Le gustaría que su hija fuera deportista de alto rendimiento y que lleve en alto el nombre de México.

“Tiene habilidades, pero a mí me encantaría que fuera en el deporte que ella eligiera, que fuera una deportista de alto rendimiento, que representara a México. Soy muy consciente de respetar los tiempos, de respetar lo que ella le desea. También juego un poco de que es una doctora y todas las cosas de niña, no hay prisa, el tiempo lo dirá, pero sí a mí me encantaría que ella fuera atleta, representara a México, claro que sí, pero no es algo que está obligada a hacerlo.

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“Lo que más deseo es que disfrute su vida, que viva, que aprenda, que siempre se vaya por el camino que ella desee, que ella quiera, siempre y cuando lo esté disfrutando”, sentenció.