Justo antes de comenzar la temporada 2024 de la NFL, los Dallas Cowboys rompieron el mercado al convertir a Dak Prescott en el quarterback mejor pagado de toda la liga, con un salario de 60 millones de dólares por campaña. Jerry Jones buscó quitarle a su mariscal de campo la presión de jugar su último año de contrato con la incertidumbre de no tener un acuerdo a largo plazo, sin imaginar que las cosas estarían lejos de funcionar.

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Más allá de que no todo es su culpa y que el futbol americano es un deporte colectivo, el quarterback ha protagonizado uno de sus peores comienzos en dos de las estadísticas claves en su posición: los pases de anotación y las intercepciones. A menudo, los dueños de las franquicias suelen pagar millones de dólares a los mariscales de campo capaces de anotar la mayor cantidad de puntos y regalar los menos balones posibles, el problema viene cuando la relación de ambas cualidades no corresponden con la cantidad de dinero que perciben.

En lo que va de la campaña, es decir, en sus siete partidos, Dak Prescott registra un total de 10 pases de touchdown por ocho intercepciones. Una relación de 1.25, el registro más bajo de su carrera. Dicho de otro modo, por cada intercepción Prescott apenas lanza poco más de un touchdown. El número está por debajo del promedio histórico de Dak, el cual es de 2.59.

A excepción de las campañas 2020 y 2022, cuando las lesiones le impidieron disputar algunos partidos de la primera mitad de la temporada, el mariscal de campo había firmado arranques mucho más productivos con los Cowboys.

Su mejor registro, curiosamente, fue en el 2016, su año de novato. En sus primeros siete partidos, Prescott tenía un ratio de 4.5, con nueve touchdowns por sólo dos intercepciones. Es decir, por cada intercepción lanzaba 4.5 touchdowns, números digo de un mariscal de campo élite. De Dak sorprendía su capacidad para cuidar el ovoide y su explosividad para anotar.

¿Qué números logró Dak Prescott en otras campañas?

A veces más, a veces menos, Prescott siempre se había mantenido en un rango aceptable. En la campaña 2017, el QB sumó 14 touchdown por cuatro intercepciones en sus primeros siete partidos, para una relación de 3.5. Para 2018, batalló en el arranque con ocho touchdowns por cuatro intercepciones, para un registro de 2.00. En el 2019, campaña en la que comenzó con siete intercepciones en sus primeros siete juegos, bajó la relación a 1.85 al sumar 13 pases de anotación.

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Prescott volvió a números de élite en el 2021 al registrar 16 pases de touchdown por cuatro intercepciones, con un ratio de 4.00. El año pasado el mariscal de Cowboys tuvo un inicio regular con 10 pases de touchdown por cinco intercepciones, para una relación de 2.00. El descenso para este 2024 fue evidente, curiosamente el año en el que ningún otro quarterback cobra más que él.