León se niega a morir y con el 2-0 que le metió a Monterrey reaviva sus posibilidades de pelear por un lugar en el Play-In. La Fiera hizo la tarea al devolverse a la senda del triunfo y ahora buscará una calificación in extremis, quedando obligado a superar a los Bravos de Juárez en la última jornada de la fase regular y aguardar por una combinación de resultados favorable.

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El ”domador” tuvo que volver a improvisar, solo que con un once de mayor experiencia y jerarquía al tener en mediocampo a Frías y al “Principio” Guardado, de igual manera, se dio el retorno a la titularidad de Ángel Mena como volante por derecha, del otro lado apareció el colombiano Edgar Guerra, quien por cierto, hizo y deshizo a su antojo cada vez que se encontró en su camino al canterano Bustos, mientras que el aparato ofensivo de los panzas verdes presumió al “Plátano” Alvarado y a Federico Viñas.

Desde el arranque, León se hizo de la tenencia de la pelota, mientras que la escuadra de la Sultana del Norte tardó en carburar, quizás por los diferentes ajustes que realizó “El Tano” Ortiz, ya pensando en lo que será su eliminatoria de semifinales en la Concachampions. Monterrey sufrió en defensiva, de manera constante su zaga corrió hacia su arco y eso lo aprovecharon los esmeraldas que, al minuto 38, se adelantaron vía “El Toro” Viñas. En un primer disparo del charrúa, Andrada rechazó la esférica, pero en una segunda chance, el examericanista no perdonó y de esta manera, facturó una nueva anotación en el Clausura 2024.

LEÓN SENTENCIÓ EL DUELO EN EL SEGUNDO TIEMPO

Ya en el complemento, las hostilidades aumentaron sus revoluciones, mismas que se cargaron otra vez del lado guanajuatense. No habían transcurrido dos minutos en la segunda mitad cuando Mena encajó el segundo. Completamente solo en el área, el ecuatoriano controló la esférica y ante la salida de Esteban Andrada, únicamente picó la de gajos para poner más tierra de por medio.

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La Pandilla lucía severamente sacudida, con la brújula extraviada y Guerra pudo haber asestado el tercero, solo que el palo le dijo no.

Rayados tuvo sus posibilidades, el problema fue que se encontró con otra gigantesca versión de Rodolfo Cota, quien primero le tapó un mano a mano a “Ponchito” González y por último frenó un cabezazo de Vázquez. Igual los de la Sultana ya tenían la fiesta grande en el bolsillo, caso contrario de un León que, como autentico felino, seguirá peleando.