31, enero 2024 - 9:37
El TSM Corona vivió una balacera a sus afueras hace algunos años / Foto: Mexsport
El TSM Corona, estadio de Santos Laguna que también es conocido como el ‘Templo del Desierto’, vivió recientemente una tragedia. Un atropellamiento masivo culminó con el fallecimiento de una aficionada de Rayados de Monterrey. Sin embargo, no es la única historia de esta magnitud que se vivió en el inmueble, pues hace años, una balacera interrumpió un partido.
Fue el 20 de agosto del 2011 cuando Santos Laguna y Monarcas Morelia se enfrentaban. Lamentablemente, un intercambio de balazos a las afueras del coloso lagunero provocaron que jugadores, cuerpo técnico y aficionados vivieran un momento de terror.
Aquel día, el TSM Corona tenía una buena entrada y los aficionados disfrutaban de una tarde de futbol. Alrededor del minuto 40 del primer tiempo, los ‘Purépechas’ tenían la pelota y se acercaban a la portería rival. De pronto se escucharon detonaciones de balas y Federico Vilar corrió hacia los túneles del estadio.
Oswaldo Sánchez también se percató de eso y corrió junto a otros jugadores, mientras que los fanáticos tuvieron que saltar a la cancha para resguardarse. Otros tantos se tiraron boca abajo en la zona de las gradas.
Aunque los jugadores regresaron a la cancha para que se mantuviera el orden y brindar tranquilidad a los aficionados, el sonido local pidió que nadie saliera del TSM Corona para asegurarse de que la situación estaba tranquila en las calles.
“Me siento orgulloso de la afición por el comportamiento ante una crisis grave”, dijo Alejandro Irarragorri.
Los disparos no fueron al interior del TSM Corona
Al principio se temía que los impactos de bala fueran al interior del TSM, sin embargo, las autoridades señalaron más tarde que un grupo armado pasaba por un circuito cercano a la cancha y una patrulla les marcó el alto. Al no detenerse, comenzó una persecución e incluso dispararon contra los oficiales.
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Afortunadamente el saldo fue blanco, aunque un policía recibió una herida de bala y hubo algunas contradicciones por parte de las autoridades, pues incluso se aseguró que fue un ataque directo contra uno de los elementos de seguridad.