Con la tecnología de Google Traductor

20, enero 2024 - 19:34

┃ Álvaro Zaldaña

El Estadio Azteca está por recibir su tercer Mundial Foto_Luis Garduño

El Estadio Azteca, mítica casa del América y de la selección mexicana, no tiene la calidad para formar parte de una tercera Copa del Mundo. Por lo menos en cuanto a su cuidado exterior, donde se encuentran una gran cantidad de detalles que fácilmente podrían llamar la atención de la FIFA si en algún momento se llegan a percatarse. Es por ello que la remodelación, planeada para iniciar a principios de febrero, es prácticamente obligatoria.

Te podría interesar: América Femenil: ¿Cuántos aficionados ingresan en sus partidos de local?

El deterioro del “Coloso de Santa Úrsula” es notable inclusive desde varios metros antes de la entrada principal. El puente que sirve de conexión entre el sentido de Calzada de Tlalpan en dirección al Centro Histórico y con una estación de Tren Ligero con el inmueble tiene mala fama. No es raro escuchar que al recorrer ese pasillo, varios aficionados han sufrido saqueos, robos y hasta asaltos con violencia sobretodo en la noche. También se sabe que las víctimas principales suelen ser extranjeros que se fían del buen trato del mexicano.

Además de la inseguridad, también destaca la poca higiene de esa conexión. Latas de cerveza, platos desechables, preservativos, y desechos fecales pueden ser encontrados tanto en el recorrido por encima como por debajo del puente.

Una vez se llega a la explanada principal se encuentran decenas de puestos ambulantes además, claro, de la cantidad duplicada de revendedores de boletos. Algunos pueden catalogarse de “amables”, al entender un “no” a la primera, pero suelen haber también los que insisten hasta cierto punto de intimidar junto a otros. Estos elementos se encuentran alrededor del “Sol Rojo”, la obra de Alexander Calder que, de monumental, ahora simplemente es un representativo mal cuidado, sin color y en su base suele albergar más basura.

EL FAN ID TAMBIÉN PROVOCA UN DESCONTROL

Unos metros más adelante, frente a la entrada principal donde bloques enormes de cemento tratan de impedir un desorden provocado por el Fan ID, se encuentran las taquillas. No hace falta decir que se acopla a la perfección con el resto del exterior; opaco, sin mantenimiento y con una puerta que ya no tiene bisagras y que solamente se mantiene amarrada a una cadena. Esto por las múltiples veces que ha estado manipulada y azotada cuando en una venta anticipada pierde el control.

Sin embargo, todos estos detalles de la explanada toman una perspectiva positiva si se compara con los días cuando no hay partidos. Personas sin hogar deambulan a diestra y siniestra, siendo las inmediaciones del estadio su lugar preferido para dejar sus desechos fecales que, con el calor del día, su olor.

La entrada tiene bastante mejor aspecto, pero el llegar ahí a pie es un calvario. Solamente un lado de la calle tiene acera, mientras que del otro, la gente debe caminar con precaución y en una sola línea para que, de milagro, no haya percance con los automóviles que pasan a centímetros.

EL ESTADIO AZTECA ESTÁ LEJOS DE VIVIR SUS MEJORES DÍAS

Ya dentro del inmueble, el piso luce por tener un color opaco, el suelo resquebrajado y varias grietas que deja la falta de mantenimiento, y por donde toda el agua desemboca para inundar ciertas partes en temporadas de lluvia. Y eso por no decir algunos espacios por las rampas principales que albergar una gran cantidad de fierros viejos, oxidados y de los cuales parece que nadie tiene la intención de sacar.

El interior es lo único rescatable. Las butacas permanecen funcionales y el juego de luces le gusta a la mayoría de fanáticos. Pero siempre hay un pero, y esa es que con fuertes tormentas suele colarse cierta cantidad por el techo, inclusive hasta en la zona para la prensa esto puede suceder. Detrás de ese mismo lugar donde se albergan los medios, las barras locales suelen ser colocadas y en más de una ocasión lanzan cervezas, líquidos y demás objetivos que caen en los reporteros que hacen su trabajo.

El Estadio Azteca, en cuanto a simbolismo e historia del futbol, es uno de los mejores recintos del mundo. Pero es proporcionalmente inverso en cuanto a lo estético, tecnológico y modernidad. La remodelación podría ser lo único que cambie su rumbo, en el camino a celebrar su tercera Copa del Mundo.

¡Ya tenemos canal de WhatsApp! Síguenos, activa la campanita y recibe las noticias deportivas