Por segunda semana consecutiva, los Ravens demostraron ser el mejor equipo de la NFL. Si el lunes pasado vapulearon de manera contundente a los 49ers, el equipo mejor sembrado en la Conferencia Nacional, en esta ocasión derrotaron 56-19 a los Dolphins, en teoría uno de los equipos que les podría plantar cara en la AFC. La victoria sirvió a Baltimore para amarrar el primer lugar de su conferencia, aunque más bien sirvió como una clara declaración de intenciones. Hoy por hoy no hay nadie que los pueda detener.

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La marca de 13-3 retrata a la perfección lo que ha sido la temporada de los Ravens, donde el común denominador ha sido el buen trabajo del mariscal de campo Lamar Jackson. El quarterback dio ante los Dolphins el mejor partido de su carrera en cuanto a lo numérico, con un rating perfecto de 158.3. Lamar brilló con cinco pases de touchdown y un total de 321 yardas, producto de una bestial exhibición donde completó 18 de 21 pases. Por tierra, su actuación fue discreta, con 35 yardas en seis acarreos.

La gran actuación del mariscal de campo refuerza sus votos para ser nombrado como el MVP de la temporada por segunda ocasión en su historia. Jackson ha encontrado la madurez en el mejor momento.

La victoria de los Ravens, sin embargo, fue redonda. Por aire, el receptor Zay Flowers brilló con un total de 106 yardas y un touchdown, mientras que el ala cerrada Isaiah Likely logró ingresar en dos ocasiones a la zona prometida. Justice Hill, Charlie Kolar y Patrick Ricard aumentaron la cuenta.

La buena exhibición también rindió frutos por tierra, al superar las 100 yardas, con Gus Edwards como el líder, con 68 yardas y un touchdown. El veterano Melvin Gordon también aportó un viaje a la zona prometida.

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Los Dolphins, mientras tanto, se vieron completamente superados. Tua Tagovailoa registró dos touchdowns, pero fue interceptado en par de ocasiones y fue capturado en tres. Ni siquiera el gran partido de De’Von Achane, quien culminó con 136 yardas totales y un touchdown, salvó la catástrofe. Por si fuera poco, perdieron a Bradley Chubb por lesión.