A inicios del 2014, el Tuca Ferretti lo dijo: “Le voy a dar un consejo a mis colegas. Cuando tengan que jugar contra el América, prepárense para jugar contra 12. La verdad ya cansa, situaciones y jugadas tan claras que uno piensa el por qué. El América es el único equipo en el mundo que juega con 12″. Casi como si fuera una premonición, en la final del torneo Apertura de ese año, las Águilas y los Tigres se enfrentaron en una final donde el arbitraje fue el verdadero protagonista.

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Bajo el mando de Antonio Mohamed, el América perdió uno a cero la Ida de la serie ante los Tigres. Y, aunque la Vuelta parecía un mero trámite para los del Tuca, Paul Delgadillo -árbitro del juego- empezó a amonestar a los jugadores felinos en la primera mitad. Para que en la segunda parte llegaran las tarjetas rojas.

Nahuel Guzmán, Damián Álvarez y Darío Burbano fueron expulsados en la segunda parte del compromiso en menos de ocho minutos y, ya con sólo ocho hombres en la cancha, las Águilas lograron la remontada y vencieron a los de Ferretti tres a cero en el Azteca para proclamarse campeones del futbol mexicano y despegarse de Chivas con 12 títulos.

Las expulsiones de Tigres que facilitaron el camino al título del América

Cabe resaltar que, en aquel torneo, aún no figuraba André-Pierre Gignac. El delantero de los de Nuevo León en aquel entonces era Emmanuel Villa, quien poco pudo hacer cuando su equipo se quedó con tres jugadores menos en el Coloso de Santa Úrsula.

Paul Delgadillo fue el mismo silbante que pitó la Final entre Cruz Azul y América del Clausura 2013, donde también hubo remontada azulcrema. No obstante, el mismo árbitro declaró en años posteriores que se equivocó. Pues los goles de las Águilas tuvieron que haber sido anulados por previas faltas a los remates en los tiros de esquina.

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