Tres producidas del receptor mexicano Alejandro Kirk no fueron suficientes para que los Azulejos de Toronto evitaran la paliza de 11 carreras a 6 frente a los Orioles de Baltimore en Camden Yards.

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Alejandro Kirk, ahora en las labores de bateador emergente, anduvo encendido con el madero y se fue de 5-3 con tres imparables y sus remolcadas. La primera enviada al plato por el tijuanense llegó en la parte alta del cuarto rollo con imparable al izquierdo, siendo Daulton Varsho en el cargado de timbrar. Posteriormente en la octava tanda volvió a ponerla por esa misma pradera, empujando en esta ocasión a Santiago Espinal y terminó con una más en el noveno, solo que el daño ya estaba hecho.

Las otras anotaciones de la novena canadiense corrieron a cargo del “Vladi” Guerrero Jr. con inatrapable al central. Esto para inaugurar la pizarra, en tanto que el inicialista Cavan Biggio se fue para la calle en solitario. Siendo ese su sexto bambinazo de la temporada y Espinal mandó otra en acción de bola ocupada hacia las paradas cortas.
Por su parte, los Orioles del antesalista sonorense Ramón Urías, se adelantaron al derby de cuadrangulares. Ya que nueve de sus rayitas vinieron respaldadas por un palo de cuatro estaciones. La pirotécnica en Baltimore la detonó Adam Frazier en el segundo inning, un estacazo que se llevó por delante a Austin Hays. Con ello los dueños del terreno ya le daban la vuelta. Luego en el tercer inning vino el panorámico de Ryan O´Hearn con Anthony Santander a bordo y todavía ante los lanzamientos del abridor Chris Bassitt faltaba el Grand Slam de Gunnar Anderson. Fue un rally de seis carreras para los locales en ese capítulo de pesadilla para el pitcheo de los Blue Jays.

Ya en el cuarto episodio, el exyankee Aaron Hicks se llenó de cuero e hilo con su tercer jonrón del año. Al tiempo que Santander y Frazier cerraron la cuenta con sencillos al sendero central defendido por Kevin Kiermaier. Para Urías fue una noche de 5-2 con par de hits, dos anotadas y tres chocolates.
En lo que correspondió al duelo de pitcheo, Dean Kremer consiguió su séptima conquista gracias a una labor monticular de seis entradas completas en las que toleró ocho imparables. Dos carreras limpias, no caminó rivales y recetó seis ponches. El serpentinero derrotado fue Bassitt, quien venía de dos triunfos al hilo en junio contra los Mets y Astros.

Los sorprendentes Orioles (42-24) siguen a la caza de las Rayas de Tampa en el Este de la Americana, más abajo vienen los Azulejos (37-31).

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