La última imagen de Rafael Puente del Río al frente de Pumas fue la de vasos con líquidos y botellass estrellándose en su cabeza, gritos e insultos de la afición que exigían su renuncia pues para ellos siempre fue el principal culpable al recibir “de regalo” la dirección del equipo, sin contar con la experiencia necesaria para estar en un “grande”.

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Pero Puente solamente estuvo tres meses en el banquillo, y los fracasos se extienden desde hace 12 años que no se consigue el título de liga, además de ligar procesos con distintos técnicos. Por ende, para “Parejita”, los principales culpables son los jugadores y los directivos, pues “son los que están dentro de la cancha, son los que tienen que sacar resultados positivos y lamentablemente no lo han hecho.

“Las decisiones que también han tomado los de pantalón largo yo creo que no han sido las adecuadas, ahí está el caso del cuerpo técnico de Rafa, no era el momento para dirigir a este equipo y más por los problemas por los que están pasando. A lo mejor la decisión de terminar su ciclo fue un poco tarde por la posición en la tabla, los resultados negativos, eso le afecta al equipo y a la afición porque esperan tener grandes alergias”, dijo al Diario de los Deportistas.

López exculpa en cierto sentido a Puente del Río pues el equipo no tuvo un mal funcionamiento del todo, sin embargo, se fallaron muchas oportunidades por parte de los delanteros y es justamente ese ambiente negativo lo que evita que Pumas salga del hoyo donde está metido.

“Cuando tienes resultados negativos no te salen las cosas. Es un plantel que puede pelearle a cualquiera pero no tienen confianza en ellos, si fallas vas contagiando a los compañeros o fallan ellos y te contagian a ti. Sabemos que los delanteros de Pumas son gente que agarran racha positiva y les causa problemas a cualquier defensa, pero esa falta de confianza viene arrastrando el equipo de varios torneos para acá”, declaró.

SUEÑA CON LLEGAR A LOS BANQUILLOS

Por el momento, José Luis López se encuentra en Barcelona, España, en un programa de estudios donde se incluyen los necesarios para ser entrenador. Su sueño es que un día se le dé una oportunidad en el futbol mexicano y que “pueda hacer lo que hacía dentro de la cancha, pero ahora desde afuera”.

“En un futuro no sabemos qué va a pasar. Si se nos da la oportunidad o tenemos la suerte de regresar a México pues luchar por ganarnos un puesto en cualquier equipo, pero antes debo prepararme muy bien, hacer las cosas diferentes para que volteen a vernos”, finalizó.

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