Acapulco, Gro.- Un duro golpe terminó siendo para Carlos Alcaraz el no poder disputar por segundo año en fila el Abierto Mexicano de Tenis.

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Luego de la final que perdió el pasado domingo en el Río Open, el número dos del mundo presentó una lesión en los isquiotibiales que le impidió jugar ante la fanaticada mexicana. Aunque hizo todo lo posible para poder ser parte de la celebración del aniversario #30, al final el cuerpo no le dio y tras una plática con sus padres, decidió ausentarse de esta parada en el calendario y alistarse para Indian Wells, primer Masters 1000 de la temporada.

Pese a las molestias físicas, Carlitos hizo el viaje y se instaló en una villa exclusiva (Fairmont Heritage Place) donde ha pasado los últimos tres días. Ahí está llevando a cabo su rehabilitación con el objetivo de poder volver a las pistas lo antes posible.

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El tenista español solamente abandona la villa durante las mañanas, para trasladarse al gimnasio del hotel sede que se encuentra justo a un costado. Posteriormente vuelve al lugar y disfruta de la envidiable vista junto a su familia.

Alcaraz se marchará este viernes de México con dirección a Estados Unidos, intentando estar la próxima semana en el cuadro principal de Indian Wells.

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