André Pierre Gignac es uno de los futbolistas extranjeros que llegaron al fútbol mexicano para hacer historia y conquistar a una de las aficiones más grandes de la liga, pero el camino para llegar a convertirse en un héroe de los Tigres estuvo antecedido por un oscuro pasado en el fútbol europeo.

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Gignac es originario de Francia, con ascendencia gitana por parte de su madre. Vivió en una familia nómada por muchos años, situación que cambió al llegar a México.

Su gusto por la comida siempre fue un problema con la afición del Marsella, equipo donde André buscaba consagrarse, el tener “unos kilos de más” le costaron burlas e inclusive cánticos de la afición.

“Una Big Mac para Gignac”, le cantaba la grada del Olympique de Marsella.

Sin embargo, con la llegada de Marcelo Bielsa a el equipo marsellés las cosas cambiaron, una frase y trabajo le cambiaron el chip al delantero: “Te conozco, bajaras cuatro kilos y meterás 25 goles esta temporada”.

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La visión de Bielsa se cumplió y Gignac superó a Zlatan como goleador en la Ligue 1.

Problemas religiosos una fuerte razón para llegar a México

La llegada de André a los Tigres fue consecuencia de una serie de factores que influenciaron al francés a tomar esa decisión. Sus raíces gitanas con un sentimiento nómada en su vida, las criticas de la afición del Marsella, además de los problemas religiosos en el continente europeo.

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“En Europa hay muchas guerras religiosas muy fuertes y por eso me fui, los atentados en Paris y Londres fueron muy fuertes”, esto sumado a las criticas por parte de los aficionados y los constantes insultos hicieron que Gignac se decidiera a emprender una nueva aventura desconocida en el futbol mexicano.

Contrario a lo que se piensa de muchas grandes figuras que llegan a la Liga MX a retirarse y cobrar mucho dinero, Gignac conquistó una enorme cantidad de títulos con los felinos, aunque aún tiene un sueño por cumplir en el futbol de América, ganar la Copa Libertadores.

Gignac encontró en México un lugar libre para él y su familia, donde gracias a su desempeño se consagró en la historia del futbol mexicano como uno de los mejores extranjeros que llegaron al balompié azteca.

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