12, mayo 2015 - 8:02

nota-espe-jungle
CORTESÍA DE JESÚS TEPEPA
DESDE que el rock nació, creció, se reprodujo… continúa aportando bandas, sonidos, innovaciones… es decir jamás permanece quieto, evoluciona a cada segundo. Una muestra es el grupo británico Jungle, que se encuentra en Tenochtitlán como parte de su rol por Latinoamérica.
“México nos ha gustado mucho, su comida es excelente, la gente muy abierta brinda su apoyo. Londres es más denso, pero acá hay mayor intensidad; es muy importante para nosotros porque literalmente el público es algo que vuela la cabeza”.
Hay sonrisas, expectación, quizá no tienen plena conciencia de lo que pueden armar.
“Hemos venido a divertirnos, nos gusta contagiar a la gente con lo que hacemos, no nos preocupa estar en un determinado género, si suena bien nos complace”.
Albión ha sido cuna de enormes leyendas, tal vez los más gigantescos rockeros provengan de esa tierra de anglos como decían los normandos.
“Si hay bandas legendarias… nosotros somos londinenses, entonces tenemos en el alma a Who, Clash, Zeppelin pero nos han influido otros más; la música británica es cosmopolita e inventiva, seguimos con esa tradición de buscar y darle la vuelta”.
Sobre ese templo bendito llamado escenario han demostrado ser auténticos y consumados profesionales.
“Nuestra música en el show es lo que sentimos, es como jugar futbol, se basa en el ritmo, la cadencia, el sonido, como es muy visual hace imaginar cosas como una playa por ejemplo”.
Allá… muy allá cuando Beatles o Rolling eran unos párvulos, se escuchaba lo proveniente de USA, verbigracia Elvis, Chuck Berry, Little Richard, Budy Holly, Carl Perkins…
“Inglaterra es como una gigantesca burbuja porque pasan muchas cosas como el horripilante dance, aunque los jóvenes oyen mucho a los clásicos, con la internet lo toman directo como si fueran cucharadas”.