Son tiempos felices para Leslie Soltero. La taekwondista de 21 años se consagró como campeona del mundo en los -67 kilogramos y a partir de entonces su carrera en el deporte de alto rendimiento ha dado un giro radical. Con el paso de los días ha dimensionado lo que logró en Guadalajara, apenas en noviembre pasado, un triunfo que le permitió meterse al top 10 del ranking mundial y de alguna manera alimentar su sueño de estar en los Juegos Olímpicos de París 2024.

TE RECOMENDAMOS: Daniela Souza apunta a repetir el oro en Centroamericanos y Panamericanos, su deseo navideño

“Se dio un paso muy grande con este campeonato del mundo, traer la medalla de oro fue un paso gigante para la clasificación a París, que fue la meta que tengo desde chica, ir a unos Juegos Olímpicos, es el sueño más grande, saber que ahora está cada vez más cerca se siente increíble y te llena de ganas para luchar todavía más fuerte y dedicarte más, apasionarte más, disciplinarte en todos los aspectos”, señaló en plática con ESTO. 

La historia de Leslie Soltero en la disciplina empezó cuando tenía 7 años. Con un futuro prometedor en la gimnasia, la atleta descubrió el taekwondo en un curso de verano, ahí quedó flechada por el vértigo de los combates, y nunca más dejó el tatami. La progresión la llevó a ser seleccionada nacional y ahí, al calor de las competencias, supo que cumplir sus sueños de estar en unos Juegos Olímpicos, ese evento que veía con sus padres los veranos de cada cuatro años y donde seguía los triunfos de María del Rosario Espinoza, una de sus grandes referentes, era posible. 

La medalla de oro que cosechó en la Perla Tapatía atrajo todas las miradas. Hace un año, en los Juegos Panamericanos Jr de Cali también se colgó la presea dorada, pero esto es otra cosa. “Esta medalla impacto mucho en mí, en mi familia, fue un logro muy grande, hasta el momento mis logros habían sido juveniles, igual tienen sus privilegios, pero ahora en adultos la gente voltea a verme aún más, entonces el impacto es mayor, toda la gente me está felicitando”, dijo. 

Los recuerdos son difusos. Sólo sabe con claridad que volteó a ver a su entrenador, en señal de victoria. El momento estuvo acompañado del júbilo de la gente, que colmó las gradas del Centro Acuático. “Que fuera en casa es impresionante, nunca había vivido un evento de esta magnitud en casa, sentir a todos los mexicanos apoyándote es muy bonito, te llena de energía, de impulso para seguir luchando todavía más”, agregó. 

En plena época de deseos y propósitos, Soltero tiene claro qué pedirá por cada uva. El 2023 impone un año saturado en eventos con Juegos Centroamericanos y Juegos Panamericanos, además del Campeonato Mundial de Riad, donde defenderá su corona. Aunque en un principio, por su juventud, podría ser parte de los Centroamericanos, su proyección y rápido crecimiento la podría reservar para la justa de Santiago. 

“La planificación la llevan nuestros entrenadores, ellos deciden cuáles eventos son más importantes para nosotros, cuáles son los fundamentales, en cuál es mejor llegar en  nuestro mejor momento, porque las cargas igualmente son diferentes por etapas y competencias, hay que saber manejar todo eso, aún no nos lo han hecho saber, pero al principio de año nos lo dirán”, comentó. 

La acumulación de eventos podría dañar a los equipos, sobre todo ante la importancia que tienen los Juegos Panamericanos en la consecución de plazas olímpicas. Soltero sabe que las nuevas generaciones, a la cual ella pertenece, pisa fuerte, por lo que hay equipo para pelear por todo. 

“México siempre ha sido una potencia en el taekwondo, saber que nosotros podemos ayudar a conseguir las metas, tener esos ídolos de antes nos ayuda a seguir creciendo, saber que somos campeones mundiales por equipos nos ayuda también a echarle muchas ganas”, cerró.

Recibe vía WhatsApp todas nuestras noticias deportivas, manda la palabra ALTA en este enlace